Caso de Laura Luelmo

Los funcionarios de prisiones reclaman más medios para evitar casos como el de Bernardo Montoya

Desde el sindicato Acaip reivindican que los trabajadores de las cárceles sean considerados autoridad

Imagen de los trabajadores de las cárceles en una manifestación reciente de Sevilla R. MAESTRE

R. Maestre

El sindicato de funcionarios de prisiones Acaip considera que la «peligrosidad» de una persona como Bernardo Montoya , asesino confeso de la joven zamorana Laura Luelmo en El Campillo (Huelva) se podría haber detectado «con más recursos» tanto materiales como humanos en la administración penitenciaria.

En un comunicado, el sindicato ha precisado que las causas o los errores que provocaron que Bernardo Montoya cometiera un delito de esta magnitud empezaron «mucho antes» de que saliera en libertad el 22 de octubre de este año .

Quizás, han indicado los funcionarios de prisiones, «si los trabajadores penitenciarios tuviéramos la condición de autoridad, y, por tanto, una mayor protección penal, cuando este agredió a un funcionario de prisiones en El Puerto de Santa María (Cádiz) , hubiera posibilitado que hubiera sido condenado por estos hechos y no se hubiera cruzado en la vida de Laura en la localidad onubense del Campillo».

«Si la administración penitenciaria no tuviera como prioridad el ahorrar en contratación de personal laboral, por su historial delictivo no hubiera obtenido ese puesto de confianza que le valió entre otras cosas para obtener dos permisos penitenciarios en 2018», ha indicado Acaip sobre Monto ya y ha añadido que «si no hubiera esta falta acuciante de personal, una formación adecuada al medio penitenciario, se podría haber detectado la peligrosidad de la persona».

Seguridad de los funcionarios

Por ello, considera que el caso de la muerte de la joven Laura Luelmo en El Campillo, Huelva , «enmarca todas las deficiencias que adolece la administración penitenciaria», poniendo éstas en peligro «la seguridad de funcionarios, presos y personas en el exterior».

«La administración penitenciaria no tiene ni medios materiales ni humanos para asegurar las funciones encomendadas por la ley penitenciaria que van encaminadas a la prevención del delito en su origen», ha indicado.

El sindicato ha reconocido «habrá personas irrecuperables para la sociedad, pero lo que este caso deja a la claras es que los trabajadores hacemos lo que podemos dentro de un contexto caótico».

Esta muerte «se podría haber evitado si la administración penitenciaria se olvidara de maquillar estadísticas y apostara por un verdadera de política de prevención del delito y protección del trabajo que realizamos a diario los profesionales penitenciarios», ha afirmado.

Según Acaip, «invertir en Instituciones Penitenciarias es invertir en prevención y seguridad para la sociedad», por lo que, «si se invierte en personal y en formación (ahora inexistente) a los profesionales penitenciarios, se trabajará en la dirección correcta en evitar que se produzcan este tipo de delitos».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación