Agresiones al personal sanitario
Las enfermeras andaluzas, las que mayor número de agresiones sufren de España
Un estudio alerta de que hace falta incorporar al menos 30.000 de estos profesionales sanitarios en la comunidad para llegar a la media europea
La paciente le cruzó la cara a la enfermera. La acusó de ponerle mal una vía en el brazo y le dio un guantazo. Ocurrió en Jaén el año pasado en la unidad Materno Infantil del Hospital de Jaén y acabó con una condena a un año de cárcel para la mujer agresora y una baja para la profesional que recibió el bofetón. La historia es real y no es tan rara. Ni siquiera es la más grave que ocurrió en la comunidad. Solo en el 2017 -último del que hay cifras cerradas según un informe de la profesión que ha realizado el Consejo General de Enfermería - los enfermeros andaluces fueron víctimas de 373 agresiones. Eso es, con mucho, la cifra más alta de España.
En segundo lugar en número de episodios violentos contra el personal de Enfermería está el País Vasco (201 agresiones), Galicia (161), Castilla-La Mancha (145) y Castilla y León (134). A la cola en agresiones está Canarias (solo se registraron dos en 2018), Aragón (cuatro) Ceuta (cinco), Melilla (ocho).
De esta forma, del total de agresiones a personal de Enfermería en España el año pasado -1.543 casos-, Andalucía registró el 24 por ciento, es decir, el doble que la siguiente comunidad -País Vasco, con el 13 por ciento de las agresiones registradas-.
Las agresione s no son la única nota negativa que presenta el informe sobre la profesión realizado por el Consejo General de Enfermería. Las cifras de profesionales de esta especialidad sanitaria que ejercen en Andalucía sitúan a la comunidad , explica el documento, como la segunda región de España con una tasa más baja de enfermeras.
Así, Andalucía cuenta con 549 enfermeros por cada 100.000 habitantes. Por debajo solo está Murcia , que tiene 430 enfermeras por cada 100.000 habitantes. En el extremo opuesto está Navarra (868 personas dedicadas a la Enfermería), País Vasco (754) o Castilla y León (689).
Andalucía no solo sale perdiendo con respecto al número de enfermeras en el resto de España. También queda en desventaja cuando se la compara con la media de Europa . Si en el resto de la UE la media por cada 100.000 habitantes es de 852 enfermeras, en Andalucía habría que contratar, estiman desde el Consejo Nacional de Enfermería, a 33.080 profesionales sanitarios de este tipo para alcanzar, al menos, la media europea.
La comunidad también está en desventaja con el resto de España cuando se analizan las especialidades de Enfermería que regula cada comunidad autónoma puesto que en Andalucía son solo tres (especialista, matrona y trabajo), mientras que en regiones del entorno como Extremadura están también reguladas las de salud mental, geriatría, Enfermería familiar y comunitaria o la pediátrica .
El informe del Consejo General de Enfermería se detiene también a comparar, por comunidades, cuántos profesionales de cada especialidad tienen los distintos servicios de salud trabajando. Así, mientras que en Andalucía hay 68 matronas, en Cataluña hay 64 y en Madrid, 49; en el caso de salud mental, Cataluña es la región que tiene más enfermeras con esta especialización (39), seguida de Andalucía (38) y Madrid (32); en el caso de Enfermería del trabajo, Andalucía tiene seis (por cinco de la Comunidad Valenciana y tres de Murcia); para la especialidad de Enfermería familiar y comunitaria, a la cabeza está Cataluña (55), Madrid (49), Castilla y León (35) y Castilla-La Mancha (32). Andalucía, con 18, se sitúa a la cola de este tipo de enfermeras. Por último, en el caso de la especialidad de pediatría, Andalucía es la comunidad donde más ejercen (26) solo por detrás de Madrid (38).
Donde sí destaca Andalucía , según este informe, es en el desarrollo de la potestad del personal de Enfermería para prescribir medicación. De hecho, destaca el documento, la comunidad es la única junto a Baleares, que «tiene implementado un sistema para acreditar a los enfermeros en materia de prescripción».
«Un educador social»
Si el desarrollo de la normativa sobre prescripción y receta de las enfermeras pone a Andalucía en ventaja con respecto al resto de España, la gestión que hace el Servicio Andaluz de Salud (SAS) sobre cómo gestiona al personal de Enfermería, censura el informe, está dirigido por un educador social. Aún así, destaca el documento, la comunidad es una de las pocas -con Baleares, Cataluña y la Comunidad Valenciana - que tiene una dirección general específica para esta profesión en su servicio sanitario -que en Andalucía se llama Dirección General de Cuidados-.
La falta de personal de Enfermería en Andalucía -y en el resto de España- «constituye una seria amenaza para el sistema sanitario y la atención de la población española en un escenario muy próximo», explica Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería. « Cabe -añade- que, a día de hoy, en nuestro país un total de 11,3 millones de personas son mayores de 64 años, un porcentaje que sigue aumentando cada año porque somos el país con mayor esperanza de vida después de Japón. Y a este envejecimiento progresivo de nuestra población se suma el de la cronicidad: el 70 por ciento de los mayores de 65 años presenta, al menos, una enfermedad crónica».
La falta de enfermeras es un problema andaluz que ya habían puesto de relieve desde el sindicato de Enfermería Satse , quienes hace meses recogen firmas para que la Junta de Andalucía aumente el número de profesionales de la sanidad que trabajan en el Servicio Andaluz de Salud (SAS).
Desde Satse también denuncian la falta de profesionales en los centros de salud y hospitales de la comunidad. De hecho, su estudio sobre la situación del sector es muy parecido al del Consejo General de Enfermería. Si en este último se echan en falta 33.080 enfermeras en la región, para Satse hay que contratar 34.593. «La ratio de estos profesionales por 1.000 habitantes en Andalucía es 4,13, mientras que en Europa es 8,8 enfermeras y enfermeros por 1.000 habitantes, y la media de España es 5,3», explican.
De igual forma, añaden desde el sindicato Satse, «en la Sanidad Pública de Andalucía la ratio por 1.000 habitantes es de 2,77 enfermeras, frente a la media nacional de 3,64 , de forma que la Sanidad Pública andaluza estaría incluso muy por debajo de la media del resto del país».
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