Encuentran la cabeza de un desaparecido 43 días después de hallar su cadáver

La Guardia Civil encontró este pasado lunes en una vaguada de la sierra de Alhaurín de la Torre la cabeza de Antonio Ortega, el joven desaparecido en Torremolinos el pasado 22 de enero y cuyo cadáver se halló, al menos en parte, el 18 de agosto. «Le faltaban cosas, pero lo más visible era que no tenía cabeza », explica a ABC Cristóbal Ortega, hermano del fallecido. Fueron meses de incertidumbre. Antonio de 32 años salió a pasear a su perro sobre las 11.00 horas y se esfumó. La familia aseguraba que tenía una enfermedad mental y que necesitaba un tratamiento que no llevaba encima.

Se montaron dispositivos de rastreo y la Policía Nacional a caballo peinó algunos parajes sin éxito. El 5 de febrero apareció el perro que lo acompañaba . El animal estaba en el túnel de Churriana, se encontraba desnutrido y con heridas en las patas, pero no había rastro de su dueño. Llegaron los rumores y decían verlo en diferentes ciudades, pero ninguna pista era certera. Finalmente, el pasado 18 de agosto apareció parte de su cadáver en una vaguada de Alhaurín de la Torre. Llevaba su ropa y la identificación fue positiva.

La familia esperaba a que se siguieran buscando los restos de Antonio, pero los resultados no llegaron. Decidieron volver por su cuenta a la sierra. El pasado sábado, parte de la familia rastreó la vaguada. Lo hicieron en un radio de unos 10 metros en relación al lugar en el que estaba el cuerpo. «Debajo de la cinta que delimitaba el perímetro encontramos el coxis, doce vértebras, la mandíbula inferior y el radio », explica el hermano del fallecido, que cuenta como metió los restos en una mochila y los llevó a la Comisaría Provincial de la Policía Nacional de Málaga, desde donde se lleva la investigación del caso.

Este pasado lunes, los equipos de sierra de la Guardia Civil, a instancias de la Policía Nacional, volvieron a rastrear la zona. Faltaba la cabeza de Antonio. La encontraron cerca del lugar donde estaba el cuerpo, pero fuera del radio de acción donde había estado buscando la familia. «Creemos que sufrió un accidente y murió. Los restos se dispersaron por las corrientes de agua o por la acción de los animales , ya que es una zona donde hay jabalíes», señala Cristóbal Ortega, que dice que los restos de su hermano están siendo estudiados por los forenses para saber las causas del fallecimiento y las razones de la dispersión de los restos mortales.