Cuando el asno se convierte en el mejor médico

En pleno bosque de Hinojos la asociación «El Burrito Feliz» ha organizado unas jornadas con afectados de fibromialgia de la Asociación Fibronuba en las que los responsables de la terapia y positivismo natural son los burros.

El proyecto se llama «Doctor Burro», y desde la Asociación «El Burrito Feliz» señalan que no se trata de nada nuevo. Ya en libros de hace doscientos años se pueden leer frases como «Cada borrico es para ti un galeno» o «Para todo en el asno hallarás remedio». Además tanto Hipócrates utilizó el zumo de estiércol de burro para curar los males de estómago de las mujeres y Polibio, afirmaba que la leche de burra servía para mejorar las defensas del cuerpo.

En esta terapia no hay que consumir ni zumo de estiércol, algo bastante desagradable por otra parte, ni beber leche de burro. En estas jornadas se pasea con estos animales, se les da de comer y cuidan de ellos, conviven con ellos y, además, aprenden curiosidades sobre los pollinos y las plantas del entorno.

El implicar a afectados por fibromialgia en estas terapias va encaminado a que puedan disfrutar de actividades que les ayuden a salir de la rutina y las penalidades que supone sufrir esta dolencia «muy difícil de diagnosticar y muy sufrida por su constante incidencia», según Mamen Zapata, presidenta de Fibronuba. Muchos afectados están sumidos en depresiones y gracias a esta actividad han salido de la cama y han reído y disfrutado.

Pero no solo para la fibromialgia sirve la terapia con burros. La idea es extender el programa a colectivos de afectados por Síndrome de Down, autismo o parálisis cerebral.