Dos profesores, a juicio por la muerte de un menor ahogado en los Baños de Popea de Córdoba

La acusación particular ejercida por los padres de Juan David, de 13 años , alumno del Instituto de Educación Secundaria (IES) Pablo Antonio de Olavide de Fuente Palmera , ahogado en una poza de los Baños de Popea en mayo de 2018 ha solicitado penas que suman ocho años de prisión -cuatro para cada uno- y seis de inhabilitaciónpor un delito de homicidio por imprudencia a los dos profesores encargados de vigilar a sus alumnos.

El Juzgado de Instrucción número 7 de Córdoba ha dictado el auto de incoación de procedimiento abreviado -con el que culmina la instrucción- contra un profesor y una profesora del citado instituto de Fuente Palmera investigadas por un presunto delito de homicidio imprudente. El auto, que es la fase previa a la apertura de juicio, oral ha sido recurrido por uno de los abogados de la defensa de los encartados, según han informado a ABC fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

La acusación particular, que ejerce el abogado Gregorio Delgado , además de las penas de prisión solicitada para los dos profesores encausados y que tenían el deber de velar por la seguridad de los menores durante la excursión , solicita responsabilidad civil a la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía y a la aseguradora.

Hay que recordar que el pasado mes de febrero, la jueza instructora del caso acordó solicitar una ampliación del plazo para investigar las causas que rodearon la muerte de un niño de 13 años en los Baños de Popea durante una excursión en mayo de 2018.

Según informaron a ABC fuentes del caso, la titular del juzgado había tomado declaración como investigados a dos profesores encargados de los menores durante la excursión a Trassierra así como a varios compañeros de la víctima y otros monitores que les acompañaban esa jornada.

Minutos antes de su desaparición , en torno a las 20.00 horas, nada hacía presagiar que el niño, de origen boliviano, iba a sufrir este trágico final. Según publicó ABC , los compañeros de la excursión escolar con los que estaba habían grabado varios vídeos con sus móviles en el que aparecía la víctima en el agua jugando con el resto de compañeros, haciendo señales con las manos y nadando aparentemente bien. Uno de los archivos fue grabado, presuntamente, por uno de los encausados. Unos vídeos que fueron recogidos por la Guardia Civil para entregárselos al juzgado correspondiente a fin de determinar las posibles causas de lo ocurrido y determinar el momento en que dejó de estar junto a sus compañeros. Juan David había llegado en 2017 a la colonia procedente de Bolivia, después de un largo proceso de reagrupamiento familiar con sus padres, que trabajan en el municipio.