El futuro de la N-432
El tramo de Córdoba de la A-81 hasta Espiel arrancará con una de las dos calzadas de la autovía
El Ministerio de Transportes centra la inversión en la parte entre Badajoz y Zafra
El Ministerio de Transportes (Mitma) ha liberado, tras semanas de espera, la documentación técnica del estudio de la primera macrofase de la Badajoz-Córdoba-Granada , la futura autovía A-81. El estudio se corresponde a los 1.192 millones que costaría el proyecto. La alternativa elegida tiene un presupuesto de ejecución material de 650 millones de euros.
La alternativa elegida se llama C2 y es la que aparece en la imagen anenxa a este texto. Se trata de un trazado muy muy similar al de la actual N-432 por razones ambientales. Analizados los suelos y sus características, los técnicos del Ministerio entienden que sería el único lugar por donde se podrían respectar las zonas de protección ambiental ZEPA o de tránsito del lince.
Una cuestión importante, y para que nadie se llame a engaño, es que el Ministerio ha dividido el tramo Badajoz-Espiel en dos zonas. De Badajoz a Zafra y de Zafra a Espiel. La primera parte es la construcción de una autovía canónica por ser la zona que cuenta con un mayor grado de tráfico.
La parte cordobesa de la A-81 se realizará más lentamente. En concreto, en dos fases. En la primera, se realizará una nueva calzada que servirá para los dos sentidos de la circulación. En el futuro, de forma indeterminada, entrará en vigor la segunda parte. Es decir, la autovía completa. El texto concreto del estudio no justifica que se haga solo una parte de la carretera por motivos ambientales. De hecho, se trata de un problema de tráfico. La zona extremeña supera los 10.000 vehículos al día. La parte de Zafra a Espiel cuenta con mucho menos tráfico.
Técnicamente, la infraestructura resultante será una autovía con el nombre nuevo, A-81. Desde Zafra a Espiel tendrá la apariencia de una carretera general mejorada ya que el estudio ha decidido no ejecutar en primera instancia las dos plataformas para cuatro carriles que constituyen una autovía propiamente dicha como la A-4 o la que une Córdoba y Málaga. Será una carretera general mejorada hasta tanto se lleve a cabo la infraestructura en su totalidad. El estudio no asigna ninguna fecha para que el proyecto se lleve a cabo. Se trata de un sistema muy similar al que tuvo la A-81 en sus orígenes cuando solo se plantearon cuatro carriles entre Badajoz y Llerena.
El proyecto desaconseja vivamente una duplicación de calzadas . Es decir, coger la actual carretera y hacerle una gemela. Fue una estrategia muy usada en España en su día que generó carreteras prematuramente fuera de normativa, que no cumplían con las especificaciones precisas en materia de radios, entre otras cuestiones. Sí establece en qué tramos, fundamentalmente de Extremadura, sería posible actuar.
Lo que asegura el proyecto es que conviene realizar el trazado nuevo de una calzada de autovía en todo el territorio pero permitiendo que la N-432 actual se convierta en una carretera de comunicación local , entre los municipios afectados tanto en la comarca cordobesa del Guadiato como en las extremeñas afectadas.
El corredor elegido prevé una intensidad media diaria de tráfico de unos 3.700 vehículos con un crecimiento anual de los tráficos cercano al 1,5 por ciento de media hasta el año 2051. El estudio asegura que la A-81 no estará en serivicio hasta 2031, una fecha muy orientativa que puede considerarse como poco realista.
El estudio apoya vivamente la conversión de la carretera en autovía por medio de la intervención en el llamado corredor C-2 , que es el de la imagen. Considera que la alternativa cero, que es dejarlo todo como está, no genera ningún beneficio.
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