El Obispado de Cádiz se opone a que las campanas de una iglesia de Algeciras suenen a Paco de Lucía

La idea es que cuando las campanas del reloj parroquial tañan en determinadas horas del día suene la composición «Entre dos aguas» pero la Iglesia lo prohíbe

Al fondo, parroquia Nuestra Señora de la Palma de Algeciras y su torre campanario ABC

Soraya Fernández

Rendir tributo al ilustre hijo de Algeciras (Cádiz) Paco de Lucía desde la parroquia principal de la ciudad. Es la idea que abandera un vecino de esta localidad gaditana animado por el compadre del guitarrista Vitoriano Mera, para que cuando tañan las campanas del reloj de la torre de la parroquia Nuestra Señora de la Palma suene el tema «Entre dos aguas» . Pero con la Iglesia ha topado. El Obispado de Cádiz lo prohíbe.

Javier Ortega se dirigió hace semanas al Obispado de Cádiz para comunicar su iniciativa y solicitar autorización para ponerla en marcha. En la carta dirigida al obispo, Rafael Zornoza Boy, recuerda que Algeciras vio nacer al guitarrista más grande de todos los tiempos, cuyos restos mortales descansan en esta ciudad.En este sentido propone que para beneficiar a la ciudad y a la parroquia, la maquinaria del reloj de la torre campanario de la iglesia parroquial Santa María de la Palma , una de las más significativas de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, cuente con un sistema que permita que en determinados momentos y cuando las campanas empiecen a tañer, suene «Entre dos aguas», la composición más conocida de Paco de Lucía y que para ello se cuente con el apoyo de profesionales que se encargan de las campanas de la parroquia de El Salvador, en Sevilla, o de la ermita de Nuestra Señora del Rocío.

El impulsor de la idea aclara que ello no supondría problema alguno para este templo, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) de Andalucía, ni coste alguno para el Obispado, ya que le mecanismo estaría preparado además para que sonasen también otras composiciones de carácter religioso cumpliendo también los parámetros establecidos en la legislación vigente.

La ecónoma diocesana del Obispado de Cádiz y Ceuta tardó sólo unos días en responderle denegándole la autorización ya que, aunque reconoce la genialidad del artista, entiende que hay otras fórmulas «más adecuadas» para homenajearlo.

Al respecto, destaca que el Decreto 156/2018 de 31 de julio ordena la inscripción en el Catálogo General de Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Monumento, de la Iglesia de Nuestra Señora de la Palma, haciendo especial mención a su reloj.

Por este motivo, concluye que el cambio propuesto con esta iniciativa « contradice los criterios diocesanos relativos al patrimonio y concluye que debe preservarse el reloj con el sonido que le caracteriza». Asimismo, añade que debe conservar esta iglesia con la mayor fidelidad posible, no introduciendo elementos «que alteren su carácter religioso como templo abierto al culto y edificio histórico».

Ante tal respuesta, Javier Ortega ha vuelto a remitir otra misiva insistiendo en su petición, aclarando que no se alteraría el conjunto sometido a todas las figuras de protección contempladas en la legislación vigente en materia urbanística y de conservación del patrimonio. Además, insiste en que en ningún momento se modificarían los elementos que componen la maquinaria del reloj ya que todo se haría mediante un sistema informático.

«No me voy a rendir»

«No me voy a rendir. No se va a tocar un clavo de la iglesia ni del reloj . Se trata sólo introducir la composición en el ordenador . Los argumentos de la negativa no se sostienen. No se han detenido a valorarlo. Hay muchas iglesias en España donde se hace esto. Estoy dispuesto a iniciar una recogida de firmas porque los algecireños me apoyan«, explica Ortega.

La devoción por Paco de Lucía en su ciudad natal es tal que Algeciras continúa avanzando en la construcción de un museo en su memoria.

La iglesia de Nuestra Señora de la Palma es el templo principal de la Diócesis de Cádiz y Ceuta en Algeciras. Su construcción se remonta a 1724 y está ligada a la refundación de la ciudad. Fue abierta al culto en 1738 y posteriormente fue ampliada con dos naves laterales y su torre campanario. El reloj de péndulo de su torre se empezó a construir en 1771 con el diseño de George Graham y fue instalado en 1804, siendo calificado por los expertos como uno de los más grandes y exactos de su categoría.

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