Los 12.000 habitantes de la aldea iraquí de Amerli ya pueden respirar tranquilos. Tras 80 días del Califato del terror, se rompe el cerco de los yihadistas del Estado Islámico a esta población de mayoría chiita a 120 kilómetros de Bagdad. Ha sido necesaria una operación conjunta del Ejército iraquí, de las milicias chiíes y los peshmergas, las tropas del kurdistan. Tres frentes que, junto con la aviación de Estados Unidos, han reducido a los yihadistas. Alemania se suma a la misión en Oriente Medio y proporcionará armas a 4.000 milicianos kurdos. Desde el aire misiles, pero también ayuda humanitaria:...