Siete destinos de cuento para viajar por Europa con niños

Pueblos con encanto para disfrutar en familia por Francia, Italia, Alemania o España

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

1234567
  1. Ascoli Piceno, Italia

    Las vacaciones de verano es el periodo elegido por las familias españolas para disfrutar juntas del tiempo libre y son cada día más las que eligen destinos europeos. Según un estudio de Booking.com, los tipos de viajes más habituales son para hacer turismo, visitar la playa, una escapada urbana o una visita a familiares o amigos. Además, según datos de reserva, los españoles que el año pasado eligieron viajar al extranjero se quedaron en Europa. Por eso, aunque Europa ofrece miles de rincones que visitar, Booking.com ha seleccionado los destinos más recomendados por y para familias entre sus más de 91 millones de opiniones verificadas. Estos son siete pueblos con encanto para disfrutar del tiempo libre.

    Ascoli Piceno, Italia

    Como buen destino familiar, Ascoli Piceno en la región italiana de Marcas tiene de todo. Cercana a Umbría, Marcas suele ser más barata que su vecina a pesar de que comparten atractivos – cabe mencionar su excelente gastronomía, su historia y el paisaje. Además, el pequeño pueblo de Ascoli Piceno está perfectamente ubicado para explorar la flora silvestre y las montañas del Parque Nacional Monti Sibillini, un lugar idílico para que disfruten niños de todas las edades mientras caminan, van en bici o montan a caballo.

  2. Segovia, España

    Incluso los niños más reticentes a la cultura quedarán impresionados con el antiguo acueducto romano, toda una maravilla de la ingeniería construida entre finales del siglo I y comienzos del siglo II. La leyenda cuenta que Segovia fue fundada por Hércules o por el hijo de Noé y, al parecer, Walt Disney se inspiró en su Alcázar para diseñar el castillo de cuento de hadas en el Disneyland de California. Y si todo esto falla a la hora de captar el interés de los pequeños de la casa, una vuelta por la zona de tapas hará a los niños muy felices.

  3. Riquewihr, Francia

    Justo el centro de esta región vinícola puede no parecer una elección obvia para viajar con niños, pero el encanto rural de la plácida Riquewihr la convierte en un destino ideal para toda la familia. Una pequeña y cautivadora localidad con casas dispuestas sin ton ni son que prácticamente no ha cambiado desde el siglo XVI. Ubicada en el corazón de Alsacia, en un paisaje marcado por la infinitud de viñedos, es un lugar lleno de rincones perfectos para disfrutar de un buen picnic a base de baguettes y queso francés.

  4. Quedlinburg, Alemania

    Quedlinburg es un irresistible pueblo en la montaña que enamorará a familias enteras, especialmente las que estén interesadas en la historia o les guste disfrutar al aire libre. La ciudad fue fundada a comienzos del siglo IX y su abadía ha sido el hogar de una comunidad religiosa para mujeres aristocráticas durante más de 800 años. Como telón de fondo, las montañas de Harz, donde se puede acceder, a través de sus senderos, a vistas inolvidables.

  5. Zakopane, Polonia

    Zakopane es una ciudad-resort polaca que puede convertirse en el campo base de muchas familias para explorar los montes Tatras. Se trata de un magnífico lugar junto al lago, desde donde observar los picos nevados de las montañas, una atracción en sí mismos. Zakopane es el destino ideal para las familias a las que les gusta disfrutar de vacaciones activas, bien para deportes de invierno o para paseos y escaladas durante el verano.

  6. Ohrid, Macedonia

    Aunque cada vez sube más puestos en los rankings de destinos más populares, el perfil todavía relativamente bajo de Ohrid implica que es mucho más asequible que cualquier otro equivalente europeo. Las vistas desde la orilla del lago son magníficas, con las montañas a ambos lados reflejándose sobre el agua. Pero no todo es tomar el sol y bañarse en el lago: esta zona también alberga restos fascinantes de las civilizaciones bizantinas y otomanas.

  7. Betws-y-coed, Gales

    El principal atractivo de este pequeño pueblo es su cercanía al Parque Nacional Snowdonia, pero su encanto también atrae a muchísimos visitantes. La historia se refleja en cada esquina de este lugar, pues es la quintaesencia británica: puentes de piedra, riachuelos tranquilos, típicas casas de campo… y todo esto sin contar con los encantos del parque natural.

Ver los comentarios