Baljenac, la isla deshabitada de los muros de piedra

Es una de las 1.244 islas de Croacia y desde el aire se asemeja a una huella dactilar humana

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Croacia es una de las joyas de Europa que año tras año conquista a millones de turistas gracias a su clima templado, abundante vegetación, preciosas calas bañadas por el mar Adriático, pueblos y ciudades medievales e islas deshabitadas cargadas de misterio e historia. Una de ellas es sin duda la pequeña isla de Baljenac, situada en el archipiélago de Sibenik, en la costa dálmata, y que pronto podría estar incluida en la lista del patrimonio cultural de la Unesco.

De las 1.244 islas e islotes que tiene Croacia solamente 66 están habitadas pero muchas de ellas están cargadas de historia. El caso de Baljenac, la isla de los muros de piedra, es un ejemplo de ello.

Cuenta la historia que en los siglos XVI y XVII, durante la conquista otomana, la isla sirvió de refugio a los cristianos que empezaron a levantar, piedra a piedra, un entramado de muros para protegerse aunque no sería hasta el siglo XIX y gracias a la agricultura, cuando alcanzase su aspecto actual que se asemeja a una huella dactilar humana.

Los agricultores de la isla cercana de Kaprije terminaron de levantar estos muros, sin ningún tipo de conglomerante, para proteger los cultivos del viento y separar los terrenos de viñas y olivares. En unos años la isla quedó cubierta por un entramado de pasillos de unos 23 km de longitud que hoy en día atraen a cientos de turistas fascinados por esta curiosa isla.

Ver los comentarios