La vida deportiva de Chris Froome se conoce por sus triunfos, que empiezan a ser unos cuantos. Lo primero que llama la atención es lo tarde que comenzó a correr.
Su vida deportiva no tiene pasado hasta los 23 años, al llegar al centro de alto rendimiento de la UCI, primero, y al equipo Barloworld, después, en 2007. Lo dirigía Claudio Corti, que le dio la oportunidad de correr su primer Tour de Francia, diez días antes de la muerte de su madre.
Seis años después, ha ganado su primer Tour en su tercera participación. En la primera lo acabó en el puesto 84. Se convirtió en el primer corredor nacido en Kenia que corría el Tour.
Le llamaron el 'keniano blanco'. La segunda ocasión en que lo corrió fue el año pasado. Lo terminó segundo detrás de Wiggins. El tercero lo ha ganado. En la Vuelta de 2011 finalizó segundo y en la del año pasado, cuarto. Ha corrido dos Giros de Italia. El de 2009 lo acabó en el puesto 36. En el de 2010 le descalificaron por remolcarse.
Claudio Corti, que ahora dirige al equipo Colombia-Coldeportes, fue quien ficho a Froome y Daryl Impey, el primer africano que se vistió de amarillo el 4 de julio, para la formación Barloworld: «Los fiché un poco obligados, porque la empresa era sudafricana. Tenía una gran cadencia en montaña, era joven, tenía ritmo. Llamaba la atención. Lo que nunca imaginé es que pudiese ganar el Tour, pero sí que podía luchar por las generales de tres semanas. Llevaba desarrollos ligeros. La diferencia es que ahora tiene mucha más fuerza que entonces. Lo que ha hecho me sorprende menos que lo de Nairo Quintana».
Pequeños detalles
Froome llevaba ganando carreras esta temporada, o estando competitivo, desde el mes de febrero, cuando dominó la Vuelta a Orán. Desde entonces ha encadenado triunfos en el Criterium Internacional, la Vuelta a Romandía, el Dauphiné Liberé, el segundo puesto en la Tirreno-Ádriático. Contando el Tour y las tres etapas que ha ganado lleva trece triunfos.
Para Dave Brailsford, el responsable de los grandes éxitos del ciclismo británico durante los últimos años en carretera y pista, «Chris se ha fijado mucho en Wiggins, que es capaz de aportar lo mínimo cuando eso no le perjudica, pero también de dar el máximo sí es necesario. Chris hace lo mismo. Ha cogido su método».
Brailsford afirma que «los grandes corredores británicos de todas las especialidades son diferentes, pero tienen una cosa en común, su mentalidad. Todos han aprendido a potenciar sus condiciones hasta el más mínimo detalle».
Brailsford ha trabajado con Chris Hoy, Mark Cavendish o Bradley Wiggins, entre muchos otros, además de Froome, tanto en la pista como en la carretera.
Su novia. Michelle Cound, también ha sido importante para él. Con ella ha aprendido a llevar un régimen que le permite estar en los 69 kilos de peso, para 1.86 de altura. «Le controlo la comida para que pueda perder los dos o tres kilos que le puedan sobrar en algunos momentos. Se cuida mucho con la comida y también entrena mucho».
