Euskaltel-Euskadi se ha roto definitivamente en el Tour. Samuel Sánchez no ha llegado a Suiza, donde finalizaba la octava etapa que ganó el francés Thibaut Pinot, el corredor más joven de la prueba con 22 años. Una caída que se produjo en el kilómetro 56 de la etapa, en la que también estuvo implicado Valverde, le dejó tumbado en la carretera, sin poder moverse, con el metacarpo de la mano derecha roto, sin desplazamiento, y una contusión en la omoplato izquierdo, en la que se ve una pequeña raya en la radiografía.
Samuel se quejaba del golpe en la espalda, que ya se había dañado en otra caída que había tenido en el Dauphiné Liberé, que a punto estuvo de obligarle a dejar la carrera. Fue trasladado al hospital de Belfort, donde confirmaron el primer diagnóstico de los médicos del Tour. Lloró amargamente el líder de Euskaltel, que en ocho etapas se ha quedado con el equipo roto.
Luego, ya en el hospital, más tranquilo, forzó una sonrisa mientras entraba al quirófano para que con menos precipitación y premura, los médicos pudiesen evaluar con más tranquilidad la situación. Valverde tuvo la desgracia de caerse encima de Samuel y agravar más el golpe. El francés Pineau fue el tercer corredor que se vio implicado en ese percance. Tanto Valverde como Samuel iban tranquilos y tuvieron la desgracia de encontrarse una montonera delante.
Jorge Azanza, primero, que iba cerca de Samuel, y Pablo Urtasun, más tarde, se quedaron a su lado, pero Samuel no se levantó. Pasó del asfalto a la camilla, de allí a la ambulancia y más tarde al hospital. Azanza, que llegó a la meta tocado, explicaba que «la caída se produjo de la manera más tonta. Habíamos estado hablando poco antes y nos encontramos una montonero. Al caernos le hemos dado a un espectador. Esto parece una guerra, todos los días hay heridos», comentaba.
Decía, apenado, que «es lo más duro que he vivido yo en mi vida. Hasta la meta ha sido muy duro. Piensas muchas cosas y me ha costado llegar». Azanza entró a 16:41, junto a Pablo Urtasun. Tomas Amezaga, el mecánico de Euskaltel que va en el primer coche en carrera con Gorka Gerrikagoitia, y que además es íntimo de Samuel Sánchez, –el asturiano se fue a vivir con su familia en Güeñes cuando intentaba hacer carrera como ciclista en Euskadi–, le levantaba las piernas, intentando darle aire.
Samuel no se levantaría. No podía. Hubo un momento, unos segundos, en los que incluso cerró los ojos, se quedó encogido, hasta que la doctora de la carrera comenzó a tocarle la espalda. Le dolía mucho. Se quejaba, en principio, más de la espalda que de la mano. Una fracturas le han dejado fuera del Tour.
A buscar una etapa
Kilómetros antes de la caída de Samuel, Gorka Verdugo, que llevaba padeciendo desde la primera curva del prólogo fuertes molestias en la cadera debido a una caída había abandonado. Euskaltel se ha quedado con cinco corredores en el Tour. Samuel Sánchez y Gorka Verdugo se han unido a Amets Txurruka, con fractura de clavícula, y Mikel Astarloza, que tiene el codo dislocado. Uno de los grandes objetivos de la temporada del equipo se ha perdido.
Siguen en carrera Gorka Izagirre, Egoi Martínez, Pablo Urtasun, Jorge Azanza y Rubén Pérez. Más desgracias en menos tiempo es difícil que se produzcan. Gorka Gerrikagoitia, el director del equipo, mantenía una cierta calma dentro de tanta accidente: «Lo único que nos queda es pelear, intentar ganar una etapa, al menos buscarla. A otra cosa no podemos aspirar».
Se paró con el coche al lado de Samuel, le vio tumbado y se dio cuenta que de allí no se iba a mover. Las desgracias de Euskaltel se unen a las que ha tenido Movistar, que ya había perdido a José Joaquín Rojas, Iván Gutiérrez e Imanol Erviti. Alejandro Valverde se está librando de un percance serio, pero tampoco gana para sustos. Le dieron un punto en la tibia derecha al llegar a la meta.
Hay otros ciclistas españoles que también han acabado en el hospital. Óscar Freire sufrió una fractura de costilla que le perforó el pulmón. Luis Ángel Mate (Cofidis), también ha tenido varios percances. Una desgracia de Tour que ha dejado a Euskaltel-Euskadi diezmado y a Movistar, muy tocado, aunque tienen a Valverde con vida, y eso es una garantía para poder conseguir una etapa.
