Universidad
Matemáticas: Madrid ignora lo que Shanghai reconoce
La US, discriminada en los sellos de calidad del Ministerio de Economía; el Instituto de Matemáticas, puntero en investigación, pierde una importante inyección económica
Matemáticas se ha quedado una vez más sin uno de los sellos de excelencia que otorga el Gobierno central y que suponían una importante inyección económica para investigar durante los próximos cuatro años. Se trata de los programas Severo Ochoa y María de Maeztu que concede el Ministerio de Economía a través de la Agencia Española de Investigación y en los que el Instituto Andaluz de Matemáticas (que aglutina a los de Sevilla y Granada) no ha logrado entrar perdiendo dinero y provocando el enojo de la Junta de Andalucía y de la propia Universidad de Sevilla.
Desde ambas instituciones se recuerda que la hispalense, con el número 49, es la primera de España en el ranking de Shanghai , una de las más prestigiosas clasificaciones internacionales y lo consideran un agravio respecto a Madrid o Barcelona que han logrado varias veces las distinciones.
El tema no es baladí ya que esos sellos llevan aparejada una importante dotación económica. En el caso del Severo Ochoa, supondría una aportación de un millón de euros en cuatro años. Y en el de María de Maeztu, al que van a optar de nuevo en la próxima convocatoria, de medio millón cada año. Eso supone que, de entrada, la Universidad de Sevilla , se ha quedado sin recibir dos millones durante los próximos cuatro años. Un dinero que podría invertir en investigación y promoción. Además desde la Consejería de Economía y Conocimiento (competente en materia de universidades) se hace hincapié en esa discriminación hacia Andalucía. Según la Junta de Andalucía, el 80 por ciento de los programas de excelencia Severo Ochoa y María de Maeztu los acaparan Madrid y Barcelona. Madrid ha obtenido 52 millones de euros repartidos entre 11 centros a través de 15 ayudas. Barcelona 84 millones en 19 centros con 25 ayudas. Andalucía sólo 6 millones en dos centros aunque el pasado año la Estación Biológica de Doñana no renovó el sello que tenía.
¿Qué ha pasado para que Sevilla y Granada (posicionada en Shanghai entre los puestos 75.100) sean excluidos de esos sellos cuando presentaron una candidatura conjunta desde el Instituto Andaluz de Matemáticas (participado por ambas).
La explicación la da Tomás Chacón, director del Instituto de Matemáticas de la US, que asegura que el organismo sevillano se presentó por sí solo varias veces, lo mismo que Granada, sin lograr el reconocimiento. Tras ello el Gobierno les recomendó que se fusionaran para optar conjuntamente a esos galardones. Sin embargo, les recomendaron fusionar Sevilla y Granada y presentar una propuesta conjunta. Pero, una vez presentada esa propuesta única a través del Instituto Andaluz de Matemáticas, constituido el pasado 20 de octubre, el Ministerio de Economía argumentó que para optar a ese galardón el organismo en cuestión debía haber sido constituida antes de enero de 2015.
«Es una excusa», dice Chacón que insiste en que en Madrid «sabían de antemano» que el instituto andaluz se había constituido recientemente y que recuerda que el número de proyectos del Plan Nacional de Investigación que consiguen conjuntamente Sevilla yGranada enMatemáticas supera al número de los que logran conjuntamente todas las universidades deMadrid, por un lado, y Barcelona, por otro. Pese a ello, ambas han logrado estos sellos que Sevilla y Granada no consiguen . «Uno tiene la sensación de que hay una carga política detrás», dice Chacón. «Somos los primeros en el ranking y no entiendo porqué hay otros centros de España que sí tienen esa distinción». Un dinero que considera vital para contratar más investigadores y descargarlos de tareas administrativas.
Desde el Ministerio de Economía se insistía en que estas distinciones se otorgan tras «un proceso riguroso» de evaluación realizado por comités científicos agrupados en tres áreas: ciencias de la vida y medicina, ciencias experimentales, matemática e ingeniería e innovación y ciencias humanas y sociales. Y recalcaban que los sellos se dan en «concurrencia competitiva» negando que exista otro criterio que el de medir la calidad de la investigación y la innovación de centros y unidades.
La US volverá a pujar para la próxima convocatoria. Lo hará el IMUS con la participación de investigadores de Granada , Málaga y del Imperial College de Londres.
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