A juicio los acusados de matar a su cuñada en La Rinconada por ser «paya»

El juez de refuerzo del Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla ha dictado auto de apertura de juicio oral por un presunto delito de asesinato contra las tres personas acusadas de matar el día 19 de abril de 2016 a una mujer en su vivienda de la localidad sevillana de La Rinconada. Se trata del caso del «crimen de las cuñadas» en el que los tres acusados, se enfrentan a una petición de 25 años de prisión por parte de la Fiscalía. Los acusados son dos hermanas del marido de la víctima, que había fallecido unos meses antes, y el novio de una de estas.

Los tres acusados mantenían graves desavenencias con ésta «generadas fundamentalmente por la falta de aceptación de que el fallecido, de raza gitana, se uniera sentimentalmente con una paya que además tenía dos hijos de relaciones anteriores y por la educación y custodia de su hija», según el auto del juzgado.

En el auto, el magistrado considera que los hechos atribuidos a E.N.S., R.N.S. y F.J.M.R. pueden ser tipificados como un delito de asesinato «por la concurrencia de alevosía y ensañamiento, tal como sostiene el Ministerio Fiscal en su escrito de calificación obrante en autos, así como las acusaciones particulares», siendo el órgano competente para su enjuiciamiento el tribunal del jurado.

El juez considera que «no concurre en la presente causa ninguno de los supuestos de sobreseimiento previstos» por lo que no acepta las peticiones de las defensas de los tres acusados.

Y es que, a su juicio, «existen serios indicios de la participación de los sujetos investigados en la causa de la muerte violenta» de la víctima, quien «recibió de sus agresores, en primer lugar, golpes en la cabeza y en los miembros superiores hasta caer al suelo para, a continuación, ser golpeada reiteradamente en el cráneo con un objeto contundente y apuñalada de forma repetida en la espalda y en el cuello; produciéndose así el acometimiento por varios atacantes, la imposibilidad de defensa de la víctima y el sufrimiento que habría de padecer ésta a consecuencia de las múltiples heridas generadas (habiéndose contabilizado hasta 61 heridas por arma blanca)».

Según el juez, la golpearon en la espalda con el cuchillo de cocina hasta que se le rompió la hoja. Una agresión que además, según el escrito del juzgado, causó a la víctima «un sufrimiento desmesurado».

Según indica el juez en el auto, los tres acusados «habrían acabado así con la vida» de la mujer , «atacando a su víctima de manera sorpresiva y encontrándose ésta en una clara situación de desproporción de fuerzas respecto de sus agresores, quienes no le dieron posibilidad ni oportunidad alguna de defenderse; asegurando así la muerte» de la víctima «sin riesgo para sus personas y sabedores del grave martirio a la que la estaban sometiendo para lograr el propósito final de acabar con su vida».