lavozdigital.es
nuboso
Hoy 5 / 18 || Mañana 7 / 16 |
más información sobre el tiempo
Estás en: >
Noticias

ENFERMEDADES

Cuidado con el pie de atleta

Provocado por hongos y levaduras, este tipo de infección se agudiza en el verano, ya que el calor aumenta la transpiración de los pies y la sudoración. Un experto da las claves para prevenirla

05.07.13 - 15:03 -
Cuidado con el pie de atleta
Usar calzado elaborado en cuero o sandalias ayuda a prevenirlo. Foto: AFP.

El pie de atleta es una infección de la piel de los pies provocada por hongos y levaduras que se localiza en la zona interdigital (entre los dedos), en la planta y laterales de los pies. “Existen varios microorganismos responsables de esta enfermedad y los más habituales son el Trichophyton rubrum y el Trichophyton memtagrophytes, aunque existen otros como el Epidermophyton floccosum y las cándidas”, explica Patrocinio Olmo Serna, podólogo y tesorero del Colegio Oficial de Podólogos de Madrid. “Estos tipos de hongo necesitan para vivir calor, humedad y oscuridad de allí que el pie sea un paraíso para ellos”.

¿Quién pueden padecerla?

Este tipo de infección afecta sobre todo a personas que tienen mucha transpiración y a aquellas que presentan alguna lesión en la piel de los pies (heridas, grietas, etc.) por donde entra el microorganismo y provoca la infección. Ahora en verano, aumenta la transpiración de los pies, con lo cual aumenta la sudoración y hay mayor probabilidad de infección, más que todo en personas que utilizan calzados cerrados y elaborados con plástico, en deportistas que suelen mantener los pies húmedos y personas inmunodeprimidas (con las defensas bajas), como es el caso de los pacientes con VIH, tratamiento prolongado con corticoides y quimioterapia.

Cómo se contagia

La forma de contagio es el uso de piscinas, duchas, al pisar descalzos moquetas de hoteles, que son sitios muy frecuentados y que no suelen estar suficientemente desinfectados.

Complicaciones

El tratamiento habitual es tópico con antimicóticos (en crema, polvo, soluciones), pero en casos más graves y más crónicos se utilizan antimicóticos orales. "Si no se trata este tipo de infecciones pueden complicarse con infecciones bacterianas, porque una vez que la piel ya está lesionada, agrietada es más fácil que las bacterias irrumpan. A largo plazo puede ocasionar una celulitis (infección del tejido celular subcutáneo) o una linfadenitis (infección del tejido linfático)", asegura el doctor Olmo Serna.

Medidas preventivas

- Controlar la sudoración de los pies con el uso de calzado transpirable, elaborado en cuero o sandalias.

- Uso de talcos secantes.

- Mantener los pies muy limpios y secos, sobre todo entre los dedos, para evitar la humedad en la zona.

- Lavarse los pies con agua y jabón a diario. Si se es propenso a la sudoración excesiva, es recomendable hacerlo dos veces al día.

- Usar calcetines de algodón, ya que absorben el sudor y mantienen el pie más seco que los de tejidos acrílicos.

- Cambiar todos los días de calzado para que el sudor que ha cogido el zapato durante el día se seque.

- Evitar estar descalzo en duchas de piscinas, saunas, y en las habitaciones de hoteles que tienen alfombras. Lo mejor es llevar siempre chanclas o zapatillas, según el caso.

TAGS RELACIONADOS
--%>
lavozdigital.es

EN CUALQUIER CASO TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS:
Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa.