La Asociación Española de Urología (AEU) ha presentado hoy el nuevo Protocolo de actuación en pacientes con cáncer de próstata resistente a la castración, un documento avalado por todas las asociaciones y sociedades científicas de la especialidad en nuestro país.
Los Presidentes de estas asociaciones y sociedades autonómicas se han reunido en Madrid en el acto de presentación del nuevo protocolo que se enviará al Ministerio de Sanidad, las consejerías de Sanidad de todas las comunidades autónomas, los colegios de médicos y las facultades de Medicina de toda España.
El doctor Jose Manuel Cózar, presidente de la AEU y jefe de Servicio de Urología del Hospital Virgen de las Nieves de Granada, resume así el objetivo del documento: «El nuevo protocolo de actuación en pacientes con cáncer de próstata tiene como objetivo uniformar la atención de estos pacientes con el compromiso de hacer sostenible, ante la llegada de nuevos fármacos, el sistema sanitario actual. Es un ejercicio de reflexión y compromiso por parte de todos los especialistas en urología de España que persigue un seguimiento y una atención continuada en una enfermedad que genera más de 22.000 casos nuevos cada año en nuestro país. De ellos, afortunadamente el 90% están en fase localizada y sólo el 4% en fase metastásica, los cuales son precisamente sobre los que versa el nuevo protocolo».
El cáncer de próstata es el más prevalente y el segundo más mortal según datos generales de la Asociación Española de Urología. Afecta a un 41,3% de los españoles de entre 60 y 70 años; a un 23,1% de los mayores de 75; a un 20,3% de los que tienen entre 70 y 75 años; y a un 14,6% de los menores de 60 años. A pesar de estas cifras, el 90% de los casos es potencialmente curativo y sólo un 4% metastásico.
Cómo afecta a los pacientes
El caso de los pacientes con cáncer de próstata resistente a la castración es el de aquellos que han sido tratados con terapia hormonal (terapia de deprivación androgénica) de acuerdo con los protocolos convencionales, pero dicho tratamiento deja de ser efectivo. Es en este punto donde la AEU desarrolla las pautas de actuación para los especialistas de urología en su nuevo protocolo, donde se recomienda no sólo un seguimiento multidisciplinar del paciente, sino también la adaptación a la situación particular de cada uno.
El objetivo es identificar efectos adversos relacionados con el tratamiento y la detección precoz de la progresión de la enfermedad, que constata la ausencia de respuesta al tratamiento para optar por otras alternativas terapéuticas, pero sobre todo mejorar la calidad de vida del paciente.
Así lo explica el doctor Miguel Unda, jefe de Servicio de Urología del Hospital Universitario Basurto (Bilbao) y Coordinador Nacional del Grupo de Urología Oncológica: «La cronología y evolución del paciente de cáncer de próstata es larga, no solamente desde un punto de vista médico y terapéutico, sino también a nivel emocional. Esto exige que el especialista se adapte a la situación particular de cada paciente, con un conocimiento exhaustivo de toda su evolución, y desde un plano que trasciende al tratamiento. Los urólogos hemos sido desde siempre los especialistas que han acompañado al paciente de cáncer de próstata en todas las etapas de su enfermedad, desde su inicio. Por todo ello creemos necesario adoptar un protocolo general de evaluación, tratamiento y seguimiento, que no pierda de vista quién es verdaderamente importante: el paciente y su calidad de vida».
Ante la llegada de los nuevos tratamientos no citostáticos para tratar a los pacientes de cáncer de próstata, el protocolo de la AEU persigue no sólo uniformar la atención de estos pacientes sino también contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario.
«Teniendo en cuenta las cifras de prevalencia del cáncer de próstata en nuestro país, que afecta a casi un 22% de la población española, la adopción de protocolos consensuados en cuanto a práctica clínica y tratamiento redunda directamente no sólo en la eficacia de los tratamientos sino también en la eficiencia del sistema sanitario. Con la atención particularizada del paciente, la aplicación de aquellas pruebas estrictamente necesarias y evitar la duplicación de visitas a especialidades distintas se contribuye claramente a la sostenibilidad del sistema», comenta el Dr. Bernardino Miñana, vocal de actividades científicas de la AEU y jefe de Servicio de Urología del Hospital Morales Meseguer de Murcia.
