Primero en remontar 2 sets en 3 partidos de Grand Slam desde 1927
Tommy Robredo firmó este domingo una espectacular remontada ante Nicolás Almagro, al que derrotó por 6-7 (5-7), 3-6, 6-4 y 6-4, para alcanzar los cuartos de final de Roland Garros por quinta vez en su carrera y romper a llorar en la pista Suzanne Lenglen después de tres horas y 49 minutos de épica batalla. Fue la tercera remontada consecutiva del jugador catalán, que también estuvo al borde de la despedida frente al holandés Igor Sijsling y el francés Gael Monfils y que se sobrepuso a la superioridad de Almagro en los dos primeros sets.
El cruce en cuartos de final entre Robredo y David Ferrer, que arrolló al sudafricano Kevin Anderson (6-3, 6-1 y 6-1) asegura un semifinalista español en París, en la parte del cuadro por la que transita el suizo Roger Federer. Robredo jugó en octavos un partido épico tras levantar dos sets en contra ante un rival al que nunca había derrotado en el circuito.
El primer parcial de un duelo en términos generales bastante aburrido entre Robredo y Almagro, a pesar de algunos buenos golpes y la emoción final, fue un parejo mano a mano que se resolvió a favor del murciano en el ‘tie-break’ en 54 minutos de fuertes y muy largos intercambios. Robredo, de 31 años, vive una especie de ‘segunda juventud’, como demostró ante Almagro, el undécimo favorito eliminado sorprendentemente cuando tenía todo a favor para citarse con Ferrer.
En la segunda manga fue Almagro quien logró hacer el ‘break’ a Robredo en el tercer juego (2-1 arriba), lo que volvió a lograr en el noveno, para así cerrarlo por 6-3 en apenas 31 minutos. Cuando llegaron al tercer set parecía que ‘todo el pescado estaba vendido’, con el murciano sólido y dominador, aunque el catalán no se entregaba. En el cuarto juego el primero logró romperle el servicio al segundo para ponerse 3-1 arriba. Sin embargo, era obvio que Robredo vendería cara su derrota y y, para sorpresa de todos, se impuso por 6-4 en 43 minutos.
El partido se animó con Robredo, con sus gafas de color, mucho más agresivo en el cuarto parcial. No obstante, fue ‘Nico’ quien logró hacer el ‘break’ en el sexto juego (4-2 arriba), pero Tommy le devolvió el cumplido en las dos ocasiones siguientes que tuvo, para cerrar de nuevo con 6-4 forzando el quinto y decisivo set. Así, lo que podría haber sido una victoria en tres o cuatro mangas para el murciano se convirtió en un duelo maratoniano. En la quinta ambos hicieron dos ‘breaks’ hasta quedar 4-4. El catalán se encargaría de liquidar por 6-4, para pasar a recibir una ovación interminable del público, que le aclamó con gritos de «¡Tommy! ¡Tommy!».
Ferrer apabulla al gigante
Antes del duelo entre españoles, y en la misma pista, Ferrer, el cuartos cabeza de serie y serio candidato al título apabulló en tres sets a Kevin Anderson, y continúa con su excelente racha. Ferrer no ha concedido un solo sets en sus cuatro encuentros y ahora espera a Robredo en otro choque fratricida. «He jugado mucho contra Tommy. Es muy sólido. Jugó muy bien contra Monfils y será un rival muy difícil», admitió el alicantino.
En la manga inicial, Ferrer, también de 31 años, jugó mucho más sólido que el tenista de Johannesburgo, de 27, que el año pasado llegó a tercera ronda en París, mientras que el español fue semifinalista. Ferrer dio la impresión de controlarlo todo, lanzando bolas muy anguladas, mientras Anderson, un jugador que le pega muy fuerte y saca con mucha potencia, cometió varias faltas y errores no forzados.
Ferrer acabó con su rival en solo una hora y 45 minutos. «Estoy muy contento con mi partido de hoy y con mi juego durante toda la semana, y ya estoy en la segunda (...) Lo más importante para mí es jugar bien», comentó el de Jávea, que ha ganado su cuatro partidos en tres sets, ganado 73 juegos y perdiendo solo 32.Su rival cometió más de 40 faltas directas, casi cuatro veces más que el español. En el momento de saludarse contrastaron sus estaturas, entre los 1,75 metros de Ferrer y los 2,03 del delgado pero gigante Anderson.
