Resumen de la primera temporada de esta serie protagonizada por Pablo, un fisioterapeuta vocacional que tiene unos métodos de terapia totalmente atípicos. Y es que tiene muy claro que tras el dolor físico de sus pacientes se esconde un dolor emocional.
Lola es una joven que padece el síndrome de Asperger, enfermedad que le ha convertido en una persona llena de fobias. Pablo es el último recurso al que acude su madre para tratarla de un problema de espalda.
Pablo se enfrenta a uno de sus casos más difíciles: el de Mónica, una mujer con huesos de cristal dispuesta a sacrificar su salud y su matrimonio por ser madre. Por otra parte, el fisioterapeuta ayuda a Teresa a recuperar la movilidad de sus piernas.
Pablo se enfrenta a un gran reto cuando trata a Ulises, un paciente que posee una extraña enfermedad que le obliga a dormir la mayor parte del día.
Julia, una escritora de éxito cuyo comportamiento se ha visto alterado incomprensiblemente pasando de ser una ermitaña a una vividora descontrolada, acude a la consulta de Pablo, que descubre que tras esa tendencia al exceso oculta algo más grave.
Alejandro, un jugador profesional con una extraña dolencia que aparece y desaparece, visita la consulta de Pablo. Además, Teresa se enfrenta a su doloroso pasado cuando decide reincorporarse al trabajo.
Miguel, un joven extrovertido y un poco alocado, famoso por colgar vídeos en su web en los que realiza experiencias extremas, se pone en manos de Pablo, que le hace replantearse su modo de vida. Además, la convivencia entre Pablo y Pilar se complica cada vez más.
El capítulo cuenta con la intervención estelar de los protagonistas de "La pecera de Eva", Alexandra Jiménez, Antonio Muñoz de Mesa y Marta Poveda, que integran un divertido triángulo amoroso.
Pablo, el fisioterapeuta que cura las enfermedades físicas mirando al alma, cierra su consulta, y lo hace visitando a Ángel, un hombre desesperado al comprobar que un cáncer de médula está acabando con su vida.