Nunca hables con extraños

Un día, Sarah conoce a un misterioso hombre en un supermercado que le seducirá. Se trata de Tony, un expolicía con un pasado oscuro. A partir de este momento, la psicóloga empieza a recibir amenazas por parte de un acosador anónimo.

En la década de 1990, el gran éxito de "Instinto básico" puso de moda el género de thriller erótico, que pronto inundó las carteleras. Uno de los muchos productos inspirados en el filme de Paul Verhoeven fue "Nunca hables con extraños", protagonizado por Rebecca De Mornay y Antonio Banderas. Ambos participaron en este filme, teniendo en cuenta el trayecto que llevaban sus carreras. De Mornay había recuperado el pulso frente al público en 1992 con "La mano que mece la cuna" y Banderas se estaba introduciendo en el mercado estadounidense. Sin embargo, el largometraje no funcionó como se esperaba, a pesar de que en España consiguió unas cifras nada desdeñables.

La película supuso la última apuesta para el celuloide del británico Peter Hall, responsable de cintas como "The Homecoming" o "A Midsummer Night's Dream", y uno de los fundadores de la compañía teatral Royal Shakespeare Company.