Los ríos de color púrpura

El mejor detective de Francia investiga un horrible crimen en una ciudad de los Alpes. Allí coincide con otro policía que busca al responsable de la profanación de una tumba. Ambos se dan cuenta de que las pistas de sus investigaciones se cruzan, así que empiezan a trabajar juntos. Sus pesquisas les llevan a una ciudad universitaria que busca el perfeccionamiento de la raza humana a través de macabros experimentos.

Película de producción francesa que, por su estilo, recuerda a filmes estadounidenses como "Se7en" o "El silencio de los corderos", y que obtuvo mejores resultados que otros filmes que se realizaron aprovechando el éxito de estos dos títulos. Se basa en una novela de Jean-Christophe Grangé, quien escribió el guión formando tándem con el director Mathieu Kassovitz (más conocido por sus trabajos como actor y recordado, sobre todo, por su papel en "Amelie").

Kassovitz llena el filme de una atmósfera inquietante, a lo que contribuye también el trabajo de los dos protagonistas, Vincent Cassel ("Juana de Arco") y Jean Reno ("Ronin"). Este último, además, es el protagonista de la secuela de la película, dirigida por Olivier Dahan.