Escondidos en Brujas

Tras un trabajo complicado, dos asesinos a sueldo descansan en la ciudad de Brujas y esperan su próximo encargo.

El aclamado dramaturgo inglés Martin McDonagh, galardonado con un Óscar en 2006 por el cortometraje "Six Shooter", reafirmó su calidad como director en el que supuso su debut en la gran pantalla. El resultado fue una producción pequeña y sin pretensiones que, sin embargo, resultó muy sólida. El guion, cargado de humor negro, recibió alabanzas de la crítica especializada y una candidatura de la academia de Hollywood.

La cinta constituye una vuelta de tuerca a las películas de asesinos a sueldo y logra dotar a los protagonistas de una humanidad con la que el espectador puede empatizar. Encabeza el cartel un trío de solventes actores entre los que destaca la actuación de Colin Farrell ("Última llamada"), cuya interpretación en el filme le valió un Globo de Oro. Su trabajo, sin embargo, no eclipsa el buen hacer del siempre correcto Ralph Fiennes y del eterno secundario Brendan Glesson (ambos en "Harry Potter y el cáliz de fuego").