El último escalón

Tom Witzky se somete a una sesión de hipnosis durante una fiesta tras la que adquiere la capacidad extrasensorial de ver a gente muerta. Esta habilidad, que comparte con su hijo, le provoca pesadillas y premoniciones de un futuro que parece tener lugar entre las cuatro paredes de su hogar. Lo que en un principio son solo imágenes tétricas, pronto se convierten en sensaciones obsesivas y muy sexuales, que llevarán a Tom al borde de la locura.

"El último escalón" es el segundo trabajo como director del guionista David Koepp, que debutó tras la cámara con "El efecto dominó". La película fue comparada desde su estreno con "El sexto sentido", con la que, sin duda, guarda muchos puntos de contacto. Sin embargo, Koepp está libre de sospecha, pues su filme está basado en una novela de Richard Matheson publicada en 1958. Rodado con un modesto presupuesto de poco más de 10 millones de euros, recaudó algo más de 20 en su estreno estadounidense.

Un resultado más que correcto, pero a años luz de los más de 260 millones amasados por el filme protagonizado por Bruce Willis.