La gran actriz del canto
En el segundo acto de «Tosca», de Puccini , la protagonista canta una conmovedora aria: « Vissi d’arte, vissi d’amore » («Viví del arte, viví del amor»). Nadie podía cantarlo con tanta pasión y convicción que Maria Callas , la mayor leyenda femenina de la ópera del siglo XX. Porque la vida de Ana María Cecilia Sofía Kaloyerópulos fue siempre una entrega a su arte, el canto, y al amor, personificado singularmente en Aristóteles Onassis , un hombre que trastornó su vida, y que provocó que Maria destruyera a la Callas.
El reinado de la soprano griega se produjo en los años cincuenta. Era una cantante de voz irregular , pero con una desbordante capacidad de comunicación. A ella (y a directores como Pasolini o Visconti , que supieron ver sus aptitudes) se debe una nueva forma de entender el canto: ella no trataba solamente de emitir notas más o menos hermosas, sino de transmitir con ellas sentimientos, de dejar que los personajes se expresaran a través de su garganta. La ópera, al fin y al cabo, es teatro, y Maria Callas fue, sin duda, la gran actriz del canto.
