El día que Emilia Clarke rechazó protagonizar «Cincuenta sombras de Grey»

Hace siete años, la escritora británica E.L. James se dio a conocer en todo el mundo tras el inesperado éxito de su primer libro: «Cincuenta sombras de Grey», la novela erótica sobre la historia de pasión sadomasoquista entre la joven estudiante de literatura Anastasia Steele y el empresario Christian Grey. El título supuso una gran revolución literaria, como sus hermanos de trilogía –«Cincuenta sombras más oscuras» y «Cincuenta sombras liberadas»– y entre los tres, encumbraron la carrera de su autora.

Viendo el éxito de «Cincuenta sombras de Grey» , varias productoras y distribuidoras se interesaron en llevar la cinta a los cines para aprovechar la inercia. Finalmente, Focus Features y Universal Pictures se llevaron el gato al agua. Como era de esperar, la jugada les salió redonda y la trilogía de E.L. James ha triunfado en las salas, con Dakota Johnson en en papel de Anastasia Steele y Jamie Dornan como Christian Grey.

Sin embargo, ni la una ni el otro fueron las primeras opciones para interpretar a los protagonistas de la cinta. La fiebre de «Juego de tronos» llevó a los productores a querer contar con Emilia Clarke, que en la serie interpreta a Daenerys Targaryen, para el papel principal. Aunque la joven lo rechazó, de la misma manera que Jamie Dornan, primera opción para ser Christian Grey, finalmente tampoco quiso participar en la cinta.

Tres años después del estreno de la primera película de la trilogía, «Cincuenta sombras de Grey», dirigida por la cineasta Sam Taylor-Johnson, Clarke ha explicado en una entrevista con «The Hollywood Reporter» los motivos que le llevaron a no querer protagonizar el filme y la saga. Sus razones, pese a lo que pueda parecer, no tienen que ver con las escenas de desnudos y sexo que copan la cinta. «No era cuestión de tener que desnudarme», revela Clarke, que ha tenido que hacerlo por exigencias del guión en «Juego de Tronos».

Sus motivos, así pues, van más allá y tienen más que ver con el gran éxito que tuvieron los libros y la repercusión que en su carrera podría tener. «Me di cuenta de la gran magnitud de todo ello.... y entonces me di cuenta de que no quería participar en eso», desvela la intérprete al citado medio. Hace dos años, en otra entrevista con «Marie Claire», Clarke volvió a referirse a su no participación en la trilogía, en la que aseguró que no quería «encasillarse» como Anastasia Steele. «No era por los desnudos, que aunque sean muy explícitos ya los he hecho, pero pensé que podría quedar atrapada en ese tipo de papeles ». Fue por ello por lo que terminó desoyendo los cantos de sirena del filme de Taylor-Johnson y el papel acabó en las manos de Dakota Johnson.