España gana y ya está en cuartos de final

España transmite buenas sensaciones. Al equipo se le ve seguro de sí mismo y avanza con paso firme hacia los partidos decisivos del campeonato. Con una muy trabajada victoria frente a Grecia (11-9), España se garantizó este sábado su presencia en cuartos. Lo que queda por resolver, y eso se dilucidará en la última jornada ante Italia (el lunes), es en qué posición acaba el equipo de Rafa Aguilar la fase de grupos. Croacia será primero seguro y España e Italia se jugarán un teórico rival más sencillo en los cruces de cuartos. Siempre sobre el papel, porque Hungría, la gran Hungría que atesora nueve títulos olímpicos, partía como favorita y no está teniendo su campeonato y puede acabar cuarta de su grupo. En cualquier caso, y quinielas al margen, España va cumpliendo paso a paso.

Suena a tópico futbolero, pero los hombres de Aguilar se han marcado el objetivo de ir partido a partido, porque solo de esa forma es posible mantener la concentración necesaria. Y frente a los griegos, los españoles volvieron a dar una lección de cómo se juega en equipo. Consiguieron cerrar su defensa a cal y canto, no solo con una actuación memorable de Aguilar, que parece que se consolida como portero titular, sino gracias a una labor de todo el conjunto. Esa es la única fórmula para que una selección del potencial de Grecia pueda acabar un partido con un balance tan negativo en las jugadas de superioridad del 30% de efectividad. Con la circunstancia agravante de que las siete primeras oportunidades, cuando el partido estaba aún por decidir, fueron siete errores en el hombre de más. España mostró su lado más solidario en defensa y también en ataque. Como ante Australia, casi todo el equipo participó en la tarea anotadora y hasta ocho jugadores lograron batir al meta heleno: todos se sienten partícipes, no hay equipo titular y todos los miembros de la selección se creen necesarios. Una gran noticia, porque el torneo es largo (ojalá), y es preciso que todo el mundo esté a tope y con la confianza máxima cuando lleguen los momentos importantes.

España cimentó su victoria en los dos primeros parciales, en los que pudo imponer su mayor calidad en el ataque. Los de Aguilar no dispusieron de muchas jugadas en superioridad, solo siete (aprovecharon cuatro), pero en el día en que no había margen de error mostraron un gran tino en el ataque posicional ante una Grecia que, como en todos los deportes de equipo, siempre se muestra muy aguerrida. Aunque predominó el conjunto, Albert Español y Felipe Perrone volvieron a liderar el ataque de los de Aguilar.