La naturalidad y la mirada de Alejo Sauras convencieron a David Trueba para que este popular miembro de Los Serrano fuera el protagonista masculino de su cuarta película, Bienvenido a casa, que acaba de llegar a los cines. Ídolo de jovencitas gracias a los dos años que pasó en Al salir de clase, este mallorquín de 28 años sintoniza con muchos chavales con el personaje que le ha dado su pasaporte a la fama, Raúl.

«Estoy en todas las escenas menos en una, pero en ningún momento he sentido miedo, aunque ahora tengo pavor. Una cosa es hacer las secuencias que te dicen y otra ver lo que has hecho en una sala llena de gente y en pantalla grande», advierte Sauras, que también ha participado en los largometrajes Diario de una becaria y el inédito Habitación 6. Diario de un asesino. Pero es en Bienvenido..., dando vida a un fotógrafo de una revista de información, donde tiene su primer papel de peso.

Papeles episódicos en las series Compañeros, A las once en casa, Menudo es mi padre, Javier ya no vive solo y El comisario y el teatro le prepararon para ser Raúl, el rol que desde hace tres años encarna en la exitosa producción de Globomedia que Telecinco emite los jueves por la noche. «En los escenarios sí había hecho comedia, pero antes de Los Serrano sólo había hecho dramas. En Bienvenido... me he dado cuenta de que hay otra forma de hacer comedia, todo depende del enfoque que le des. No se trata sólo de contar chistes muy graciosos», comenta este ex estudiante de electrónica y japonés.

Sin cambiar su discurso porque, aunque le gusta mucho el cine, «prefiero estar en una buena serie que en una mala película», Sauras no se ha dejado deslumbrar por la gran pantalla. «Tal y como está el cine español no espero nada. Me gustaría seguir haciendo películas para investigar porque el cine es una novedad para mí y quiero probar cosas nuevas. La televisión me fascina. Siempre le estaré agradecido porque gracias a este medio soy lo que soy y me ha dado la formación que tengo. Estudiar es importante, pero ha sido el trabajo, la televisión, la que me ha dado destreza ante la cámara, controlar las distancias, y saber observar a mis compañeros. Me ha facilitado dominar los aspectos técnicos y poder concentrarme en lo importante», reconoce.

Termómetro propio

Sauras estará en Los Serrano hasta verano, cuando la serie se tomará un descanso y él aprovechará para hacer alguno de los proyectos cinematográficos que está estudiando. «Seguiré en Los Serrano siempre y cuando nos apetezca a las dos partes implicadas, a Globomedia, que es la productora española más humana, y a mí. Si cuentan conmigo y tengo tiempo, ahí estaré», asegura este intérprete que pone «ganas y corazón» en todo lo que se implica.

No lo ha hablado con ninguno de sus compañeros de la serie, pero sí ha pensado lo que les ha pasado a dos actrices. Blanca Portillo, desde que abandonó 7 vidas, no para de hacer cine. Belén Rueda, tras Mar adentro, no ha vuelto a salir en los fotogramas.

«No hago caso de los consejos, sólo cuenta la opinión de la gente que me quiere. Si me apetece hacer televisión, lo haré, y si me equivoco, pues será que tenía que ser así. No estoy en la tele porque no tenga ofertas de cine, sino porque aprendo y me divierto en Los Serrano. Raúl ha calado, lo sé por lo que recibo en la calle, que es mi termómetro».