La rabia de los jóvenes del sur da bríos al populismo de Grillo

El Movimiento 5 Estrellas se mantiene como primera fuerza política de Italia

Luigi Di Maio durante un mitin esta semana REUTERS
Ángel Gómez Fuentes

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Beppe Grillo es como Hugo Chávez, y como Maduro sueña con el socialismo real en el tercer milenio; quiere convertir Italia en Venezuela. Imagina un modelo de sociedad que no debe crear riqueza, donde las empresas son financiadas por el Estado». Este es el durísimo juicio que sobre el cómico Grillo, fundador del Movimiento 5 Estrellas (M5E) , da un conocido empresario italiano, Massimo Colomban, 68 años , un excolaborador muy estrecho de los populistas, que fue hasta octubre asesor económico de la alcaldesa de Roma, la «grillina» Virginia Raggi. Colomban, a quien Grillo presentó en el pasado como «nuestro superministro de Economía», con la misión de escribir el programa de reformas para Italia, se marchó dando un portazo a al M5E porque se le «acabó la paciencia»: «No logré cambiarle ni a él ni a su Movimiento», explica ahora con amargura. Y sentencia: «Grillo adopta el 95 % de las decisiones en el Movimiento y nadie tiene el coraje de contradecirle, porque sería marginado».

«Grillo adopta el 95 % de las decisiones en el Movimiento y nadie tiene el coraje de contradecirle, porque sería marginado»

Grillo sigue manejando los hilos de su criatura política, aunque anunció recientemente que se retiraba y dejaba al frente del Movimiento a Luigi Di Maio, 31 años , vicepresidente de la Cámara de diputados. Al candidato a primer ministro del M5E le gusta presentarse a sí mismo y a su Movimiento, como la auténtica novedad en el panorama político italiano: «Todos los partidos han tenido la ocasión para gobernar, pero no ha funcionado. Ahora nos toca a nosotros», afirma Di Maio, un meridional (Avellino, Campania) que está cosechando muchos votos en el sur de Italia, donde se juega una batalla decisiva de esta campaña electoral. Todas las encuestas dan al M5E como primer partido, a nivel nacional, con el 28%% de los votos, un porcentaje que ronda el 35% en Cerdeña, el 34% en Sicilia y el 31% en Campania. Esta ola se está propagando gracias el empuje de los jóvenes, enojados con los partidos tradicionales y llenos de rabia ante su negro futuro: el desempleo juvenil alcanza el 60% en muchas zonas del sur de Italia.

Identificación

Para el escritor meridional Marco Ciriello, 42 años , el éxito del fenómeno del M5E en el sur tiene una explicación: «El meridional Di Maio, que ni siquiera ha acabado la Universidad, que se equivoca con los subjuntivos, y que no ha logrado tener nunca un trabajo, provoca que se identifiquen con él muchísimos jóvenes y ya no tan jóvenes meridionales que sienten rabia hacia todo lo institucional, que odian a todos los que han logrado "situarse". Esos que se han quedado varados en casa son jóvenes a menudo mediocres, desgraciadamente sin currículum, que se identifican con un líder que tampoco lo tiene». Los analistas consideran que si esa juventud frustrada, que no tiene nada que perder, arrastra a sus padres a las urnas con su misma preferencia electoral, el Movimiento 5 Estrellas puede recibir una avalancha de votos.

Hay otra razón importante en el voto del sur hacia el Movimiento 5 Estrellas. La competición clásica de las elecciones ha sido entre la derecha y la izquierda, pero esta vez la carrera se plantea también entre el norte rico y el sur pobre: algunos intelectuales, profesores y funcionarios votarán al M5E como una forma de protesta contra la subordinación del sur . Así lo explica el ensayista e investigador de Historia contemporánea Aldo Giannuli, próximo al Movimiento: «En el sur preocupa menos el tema fiscal, una cuestión que hará que la derecha gane en el norte».

Pese a sus fracasos

El apoyo electoral al M5E se mantiene invariable desde hace muchos meses, a pesar de los fracasos de sus administradores locales –el caso de Virginia Raggi, alcaldesa de Roma , se percibe en general como un desastre–, y de algunos recientes escándalos como la designación de masones para candidatos al parlamento, o el fraude económico llevado a cabo por una docena de sus parlamentarios que, en contra de las reglas del partido, engañaban con recibos bancarios para quedarse con todo el sueldo, sin devolver una parte a la formación.

Luigi Di Maio ha hecho una campaña electorado marcada por la moderación , para reducir, al menos en parte, la imagen de populismo que se había ganado el Movimiento guiado por el cómico Grillo desde 2013. Pero sus promesas son, como las de la mayoría de los partidos, imposibles de cumplir. Según el profesor de Economía, Roberto Perotti, el programa del Movimiento, con un coste de 108.000 millones de euros, no es realista. Destaca su propuesta de una «renta de ciudadanía», que costaría al menos 30.000 millones de euros: consiste en garantizar un mínimo de 812 euros al mes a cada persona soltera y 1.706 euros a un matrimonio con dos hijos menores de 14 años. Puro populismo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación