Ellas crean el hashtag «#MiVelloMisNormas» pero, ¿qué quieren ellos?

Este verano el pelo en el cuerpo ha conseguido tener su propio hashtag: «#MiVelloMisNormas», que estos días está revolucionando Twitter. Ha sido creado por el colectivo feminista Amatista y busca defender la depilación solo como una opción, y no fruto de las presiones sociales. Muchos tuiteros han manifestado su opinión al respecto quejándose, por ejemplo, de que mientras una mujer sin depilar está mal visto en el caso de un hombre es demostración de virilidad pero, ¿cuál es la realidad?

Según se desprende de un estudio sobre hábitos de cuidado personal masculino de Philips, el 78% de los hombres luce habitualmente algún tipo de vello facial, y de éstos la opción más popular es la barba de tres días (43,7%), seguida de la barba más poblada (25,6%).

El resto de opciones de estilo son la perilla, el bigote o las patillas, pero estas se presentan como opciones minoritarias.

Pero, ¿lucen los hombres el estilo que desean? Del informe se concluye que uno de cada tres hombres no lo hacen. La barba es el estilo de vello facial más aspiracional pero casi un 33% de los hombres no la luce. ¿Por qué? La falta de tiempo y el esfuerzo que supone una barba cuidada son los principales motivos por los que algunos hombres no llevan el vello facial como les gustaría.

Eso sí, el look de los hombres en cuanto al estilo del vello facial que llevan coincide con el que les gusta a las mujeres, ya que el 71% de las mujeres encuestadas declararon que la barba de 2 o 3 días es su estilo preferido.

Vivir en pareja, mayor cuidado del vello facial

El 62% de los hombres se arreglan el vello facial al menos una vez a la semana, frente al 6% de los que lo hacen diariamente o el 28,9% que se afeita una vez al mes. La frecuencia con la que los hombres se arreglan el vello de la cara aumenta cuando estos hombres viven en pareja. Uno de cada tres hombres que viven en pareja se afeitan varias veces a la semana, mientras que entre los que no viven en pareja este porcentaje baja al 23,5%.

En lo que a productos se refiere, el uso de productos de afeitado no ha evolucionado tanto como cabría esperar: aftershave, lociones y espuma siguen siendo los complementos más utilizados para acompañar al afeitado. Sorprende en este apartado que un 27% de hombres no utilice ningún producto en su rutina de afeitado. De nuevo, en lo que a cosméticos se refiere, los hombres que viven en pareja utilizan lociones y espuma en mayor medida que los que no conviven en pareja, que optan por el gel de afeitado como opción preferida.

Cómo se afeitan

Según este estudio, desarrollado entre hombres de entre 18 y 35 años, un 71% de los hombres jóvenes utiliza aparatos eléctricos para afeitarse, únicamente o combinados con otras opciones manuales. Por término medio, los hombres utilizan dos utensilios para arreglarse el vello facial. Los tres productos más utilizados para ello son los cortapelos eléctricos (37%), la maquinilla desechable (34,6%) y la afeitadora eléctrica (31,7%). Ésta última es significativamente más utilizada por los hombres más jóvenes (18 a 25 años).

Prácticamente a todas las mujeres les gusta que los hombres utilicen aparatos eléctricos de afeitado o depilación y el 47% han regalado a su pareja en alguna ocasión utensilios para la depilación o el afeitado. El regalo estrella: la afeitadora eléctrica.

¿Y qué ocurre con el resto del vello corporal?

Un 80% de los hombres eliminan el vello de otras partes de su cuerpo. Curiosamente, es más frecuente depilarse otras partes del cuerpo cuanto mayor es la longitud del vello facial. Casi un 84% de los hombres con barba se depila, mientras que este porcentaje baja al 71% entre aquellos que lucen un afeitado apurado.

En esta cuestión no hay consenso entre hombres y mujeres. El vello corporal que más preocupa a los hombres es el de genitales (66,8%), entrecejo (49%) y pecho (40,6%). A las mujeres también les gusta que ellos se depilen, pero las zonas esenciales para ellas son entrecejo (63.4%), espalda (44.9%) y nariz (44,2%) y en menor medida orejas, pecho y genitales. Entre los hombres que se depilan otras partes del cuerpo, no vivir en pareja es determinante: aumenta el número medio de zonas depiladas.

Para la depilación corporal el 68% de los hombres jóvenes utilizan aparatos eléctricos, un 35% de ellos los combina con utensilios manuales. El láser solo es una opción para el 2.6% de los hombres. Casi el 45% de los hombres que viven en pareja utilizan sólo aparatos eléctricos.