Una ideología para cada Semana Santa

Cabría pensar que en una región donde la peregrinación a Santiago permite ver con claridad de qué manera religión y cultura tienden a confluir en algunas tradiciones, los partidos políticos tendrían una postura más o menos homogénea a la hora de relacionarse con organizaciones de laicos como las cofradías de Semana Santa. Sin embargo,la llegada al poder en varias ciudades de coaliciones integradas por formaciones de izquierda y nacionalistas están revelando ciertas incongruencias, pues adoptan decisiones muy diferentes en función del concello que gobiernen. Se puede pasar del rechazo y el menosprecio a la plena colaboración y el entendimiento sin cambiar ni de siglas ni de provincia.

Diplomacia santiaguesa que Ferrol no maneja

La más sonada de las controversias la protagoniza desde antes del verano el alcalde de Ferrol, Jorge Suárez, cuya actitud con la subvención económica, su indefinición y algunas declaraciones

cargadas de ironía hacia la hermandades han crispado a la Junta de Cofradías, que amenaza incluso con suspender sus procesiones, lo que supondría un varapalo a los intereses turísticos de una comarca muy deprimida. PSdeG y BNG  se alinean del lado del regidor —de Izquierda Unida, en coalición con Anova y Podemos— mientras que el PP promueve el debate y Ciudadanos lo secunda.

En Santiago, Martiño Noriega —de la también alianza rupturista Compostela Aberta— está haciendo gala de una diplomacia que, sin llegar a ser vaticana, le reporta buenas relaciones con la Archidiócesis, la Catedral y ahora con la Xunta de Cofradías. Los desfiles penitenciales en la capital, aún siendo destacados en número e historia, no tienen la dimensión de los ferrolanos, de ahí que en su caso no pidan una ayuda económica como la de la ciudad naval. Tampoco serviría de nada que lo hicieran: en su reunión de la semana pasada el alcalde ya les advirtió que no la habría. Lo que queda pendiente de estudio es si el Concello se hará cargo —como hasta ahora— de la edición y la impresión del cartel y los programas de mano, algo que Noriega no garantizó, pese a que los cofrades lo ven como «un acuerdo de promoción turística de la ciudad».

Estos reparos no existen en cambio en lugares de honda raigambre semanasantera como Viveiro, una localidad con tallas articuladas de los siglos XV y XVI pese a que un diputado de Alternativa Galega de Esquerda (AGE) asegurara en el Parlamento que la Semana Santa gallega fue una imposición del franquismo. El PSOE apoya sin remilgos las procesiones de este municipio de la Mariña desde hace décadas.

Socialistas a ambos lados

El propio secretario general de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro, elogiaba esta celebración popular en la última revista que la Xunta de Cofradías viveirense publicó en Cuaresma:«Reitero que la Diputación [de la que entonces era presidente] seguirá reforzando más si cabe toda la atención que llevamos prestando tanto en el aspecto económico como en el técnico». Sin embargo, su grupo parlamentario vota en dirección contraria en O Hórreo sobre Ferrol y tampoco siguen sus directrices los concejales liderados por Beatriz Sestayo. Cabe esperar que la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, si lo secundará como venía haciendo cuando era vicepresidenta de la institución provincial. Tan solo para la Semana Santa de la ciudad amurallada hubo 12.000 euros.

Así lo ven también en Fisterra. Desde junio, este Concello de la Costa da Morte está liderado por un bipartito de socialistas y nacionalistas que se ha puesto manos a la obra para lograr la declaración de Semana Santa de Interés Turístico Nacional, un título con el que erróneamente todo el pueblo pensaba que ya contaban. Ha sido uno de los primeros asuntos en abordarse en los primeros compases del mandato. Hace poco más de un mes, el pleno municipal aprobó por unanimidad iniciar las gestiones pertinentes e incluso invitaron al presidente de las hermandades a que tomara la palabra durante la sesión. El regidor, del PSOE, y el teniente de alcalde, del Bloque, manifestaron su «compromiso y entera disposición» en este sentido.

Edil del BNG entre cofrades

Este ir y venir de posturas hacia la Semana Santa lo cierra Cangas, gobernada por un tripartido de ACE(Alternativa Canguesa de Esquerdas), BNG y ASpUN (Asamblea pola Unidade). En 2016, esta villa pontevedresa acogerá el XXIX Encuentro Nacional de Hermandades de Semana Santa, una cita que suele congregar cada año por septiembre a centenares de cofrades. Para defender la candidatura, una comitiva se desplazó a la localidad valenciana de Alzira. Tomaron la palabra, además del párroco y del presidente de la Coordinadora de Cofradías, la concejala del Bloque Mercedes Giráldez, que viajó en sustitución de la edil titular de Turismo. De nuevo, actitud opuesta al desdén con el que la parlamentaria Carme Adán trató la Semana Santa en una comisión.