Críticas por renovar conciertos a los centros que segregan por sexo

La Xunta publica la orden de ayudas para los cinco colegios sin aulas mixtas existentes en Galicia

Un escolar en un centro educativo gallego JAIME GARCÍA

D.G.

El PSdeG y el sindicato CIG mostraron ayer su malestar por que la Xunta de Galicia renovase los conciertos educativos a los cinco centros que segregan a su alumnado por sexos. El Diario Oficial de Galicia publicó la orden que aprueba las ayudas económicas a los colegios privados para los próximos seis cursos. Entre ellos se encuentran los coruñeses de Montespiño y Peñarredonda, los vigueses de Las Acacias, Montecastelo y Aloya , todos ellos sin aulas mixtas.

A través de un comunicado, el portavoz de Educación del Grupo Socialista, Luis Álvarez consideró que la decisión que «va en contra de lo establecido en la Constitución para la enseñanza» y está «financiado con fondos públicos». Por su parte, el sindicato nacionalista CIG censuró que el Gobierno del PP «está dispuesto a favorecer a determinados tipos de centros, públicamente vinculados con el Opus Dei» con conciertos que «se mantuvieron de forma contraria a la ley en su momento».

Hasta 2013, estaba vigente la LOE (Ley Orgánica de Educación), que en su articulado incluía un criterio de no discriminación por sexo. Tras un recurso de la CIG, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia anuló los conciertos con los centros que segregaban por sexos en la Comunidad. Pero entonces, el Gobierno central decidió cambiar la ley educativa y en la polémica Lomce dio amparo legal a los colegios sin aulas mixtas.

Según la CIG, la Xunta «aplica la Lomce con toda su crudeza contra la enseñanza pública gallega, ya que además de mantener a los conciertos que segregan por cuestión de género fija la duración de los conciertos en seis años, cuando esto solo es preceptivo para la enseñanza primaria».

Luis Álvarez, del PSdeG, considera que a pesar de que el PP se ampare en la Lomce, «la realidad es que no está fundamentado en ningún criterio pedagógico que sostenga desde un punto de vista científico» que la segregación sea buena para los alumnos.

Al margen de los centros que segregan, la orden establece que para el curso 2017-2018 habrá, en total, un incremento de 21 unidades concertadas en la educación gallega. Serán 3.913, que dan servicio educativo a 86.000 estudiantes en centros privados.

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