Ciudadanos esconde a sus cabezas de lista en Galicia en su mitin central

Ni siquiera en el prácticamente único mitin celebrado en esta campaña en Galicia los simpatizantes de Ciudadanos han podido escuchar a los cabezas de lista de sus provincias. Pese a que al menos los cuatro candidatos al Congreso de los Diputados se encontraban presentes en el acto, no se acercaron al micrófono ni para saludar al respetable y agradecerles su asistencia. Apenas un gesto al ser nombrados al principio del evento y dispuestos a seguir con su campaña basada en el silencio, los repartos de propaganda y los «actos de proximidad».

Sí habló otra gallega, la número tres al Congreso por Madrid, Marta Rivera de la Cruz. La candidata desgranó propuestas curiosas de su programa electoral como la creación de un registro de lugares que serían apropiados para grabar películas o anuncios en toda España para impulsar la captación de proyectos audiovisuales, y explicó que la bajada del IVA cultural «va a tener un impacto positivo en Galicia porque va a bajar la tributación de las orquestas, que tienen un peso muy importante por las verbenas veraniegas».

La ausencia de Rivera

Albert Rivera, que había planeado en un primer momento de esta campaña abarrotar la Plaza del Obradorio compostelana no estuvo, pero excusó su ausencia. Mediante un vídeo de móvil grabado durante un trayecto en coche explicó a la audiencia que el motivo que lo alejó de su mitin central en Galicia —y que provocará que sea el único de los cuatro grandes líderes que no pasará por la Comunidad— era el de acudir al funeral de Estado por los policías fallecidos en Kabul la pasada semana. Pero el partido envió a su segunda espada, la sucesora al frente del grupo parlamentario en Cataluña, Inés Arrimadas.

La actual líder de la oposición en la Cámara catalana se está convirtiendo por méritos propios en una de las pocas caras reconocibles de la formación además del propio Rivera. Llegó al escenario escoltada con honores y prisas de estrella del rock. Una vez en el atril exhibió sus dotes oratorias con el acierto habitual en ella. Recordó su primera visita a Galicia con 18 años para hacer el Camino de Santiago y cuando en 2010 asistió al mitin de Ciudadanos que le hizo entrar en política.

Arrimadas advirtió que Albert Rivera es «insustituible», pero ella fue capaz de disparar con similar eficacia la ráfaga de propuestas de su formación en materia de economía, regeneración democrática y reforma de las instituciones. «Ciudadanos nació en Barcelona, pero con una idea de España»,relató solemne y tiró de eslógan con soltura para invocar al diálogo y a grandes consensos en grandes temas como la educación o la reforma constitucional. Incidió en ello aludiendo a que «el cambio no vendrá de la derecha o la izquierda, sino por el centro» y marcó distancias con otros emergentes como Podemos, señalando que «Ciudadanos no quiere derribar el sistema, sino mantener lo que funciona y arreglar lo que no funciona».

Argumentario catalán

Incluso en algún momento a la diputada catalana se le escapó el argumentario regional y sacó pecho de sus actuaciones contra el secesionismo catalán y de su discurso en la Comunidad, para terminar matizando que «esto también afecta a Galicia, porque cuando un país no funciona se generan divisiones que hacen que el conjunto se acabe debilitando». Arrimadas apeló a la movilización masiva de los electores y situó los deseos de participación en un 80% para que su formación pueda alcanzar los objetivos que se marcan y pidió un voto «con ilusión» para su partido porque «ahora ya no hay que elegir al menos malo, sino que se puede escoger al mejor».

Y como llegó se marchó. Arrimadas no esperó a los incondicionales que, algunos ya teléfono en mano, se disponían a pedirle alguna foto. Todavía sonaban los aplausos a su discurso cuando ya había abandonado el recinto coruñés.