Puigdemont no descarta el referéndum unilateral aunque asegura que prefiere la vía escocesa

El presidente de la Generalitat confirma que descarta en septiembre buscar en exclusiva el acuerdo con la CUP

BARCELONA Actualizado: Guardar
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El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha evitado hoy descartar un referéndum unilateral de independencia, porque "técnicamente es una posibilidad", aunque ha enfatizado que los "esfuerzos" hay que concentrarlos ahora en reclamar al Estado que autorice a Cataluña la vía escocesa.

En declaraciones a RAC 1, Puigdemont ha insistido en que la "opción mayoritaria" en Cataluña es la defensa de un referéndum "a la escocesa", acordado con el Estado, como ocurrió en Reino Unido con el referéndum escocés: "Dirán que no, pero es un escenario que lo hemos de contemplar", ha afirmado.

Además, ha explicado que, en la cuestión de confianza a la que se someterá en septiembre, aspira a que su hoja de ruta soberanista, que piensa "mantener hasta el final", reciba "los apoyos más amplios posibles".

Carles Puigdemont ha razonado que, después del desengaño de la negociación presupuestaria con la CUP, no quiere "ir a la cuestión de confianza con un acuerdo previo" con los anticapitalistas, porque "desconfiaríamos mucho de un papel firmado" con ellos, informa Efe.

El president espera que los planes que presente ante el pleno del Parlament en septiembre recaben el apoyo no sólo de la CUP, sino incluso de otros grupos de la cámara catalana. De hecho, tras las elecciones del 26 de junio, Puigdemont tiene previsto multiplicar sus contactos con partidos catalanes y de ámbito estatal, entidades soberanistas y agentes económicos y sociales, con el fin de perfilar su nueva hoja de ruta.

Convencido de que el 26J quienes aún defienden que es posible una mayoría parlamentaria en España que permita un referéndum en Cataluña se quedarán sin argumentos, Puigdemont intentará atraer hacia su plan soberanista el espacio de la izquierda alternativa en Cataluña que encarna la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

Sobre el plazo de 18 meses para convocar unas elecciones constituyentes en Cataluña, ha relativizado la importancia de los tempos e incluso ha considerado "generoso" ese margen de tiempo que se dio el Govern para preparar la independencia. Al final, la fecha de la convocatoria de las elecciones constituyentes "será una decisión política, no técnica", ha señalado.

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