El PSC advierte que la insurrección de los CDR puede llevar a un «enfrentamiento civil en Cataluña»
El Secretario de Organización del PSC, Salvador Illa, pide a las autoridades catalanas que garanticen la movilidad de los ciudadanos durante el retorno de Semana Santa
Si persisten los actos «insurreccionales» como los cortes de carreteras realizados estos últimos días por los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR ) «no es descartable que haya un enfrentamiento civil en Cataluña». Así se ha expresado hoy el Secretario de Organización del PSC, Salvador Illa, antes de exigir a las autoridades catalanas que garanticen la movilidad durante la operación retorno tras las vacaciones de Semana Santa.
«Hay que ir con mucho cuidado con este tipo de acciones, porque si no se les pone coto se puede llegar a un enfrentamiento civil en Cataluña que no deseamos y que haremos todo lo posible para que se pueda evitar», ha indicado Illa en declaraciones a los periodistas en Barcelona.
En este sentido, Illa ha calificado de «actos insurreccionales» las protestas protagonizadas por los CDR ante la pasividad de los Mossos y ha advertido que actos como levantar las barreras de los peajes «no entran dentro del pacífico y legítimo derecho de manifestación». Así las cosas, el dirigente socialista ha afirmado que la mejor manera de evitar esl riesgo de enfrentamiento social es que se confirme lo más rápido posible un gobierno en Cataluña que respete la legalidad y acepte el actual marco legal vigente de la Constitución y el Estatut.
Las dos «pulsiones» del independentismo
El Secretario de Organización del PSC también ha celebrado que dirigentes independentistas como Artur Mas estén marcado distancias respecto a una posible investidura de Carles Puigdemont como presidente del Govern al entender que suponen un «paso» hacia la aceptación del «principio de realidad» de que la vía unilateral «sólo ha llevado al caos y a la división».
Así las cosas, Illa ha apuntado que en el mundo independentista catalán se observan actualmente «dos pulsiones». Una que acepta el «fracaso» de la vía unilateral y opta por adaptarse al marco legal vigente y otra, que encabeza Junts per Catalunya (la formación de Puigdemont), que sigue apostando por la vía unilateral.
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