Siglos de historia a pico y pala

Tiempo atrás, allá por el año 133 a. C. la ciudad de Numancia (situada en el actual Garray) fue un pueblo celtíbero que destacó por la resistencia ante los constantes ataques romanos, muy parecido a «la Galia» de Asterix y Obelix de los cómics. Publio Cornelio Escipión Emiliano «El Africano Menor» fue el militar que ordenó la conquista de Numancia. Aunque lo consiguió, tardó más de veinte años en poder destruir Numancia, y lo consiguió mediante un gran asedio. Levantó un cerco de más de nueve kilómetros apoyado por fosos, empaladizas, torres, etc. Tras más de diez meses de penurias por parte de los numantinos, decidieron poner fin a su calvario, bien convirtiéndose en esclavos del Imperio Romano o bien suicidándose.

El arqueólogo Alfredo Jimeno, el director del Museo Numantino, Elías Teres, y el secretario territorial de la Junta de Castilla y León, Rafael Medina, presentaron hace unos días la campaña de excavaciones «Numancia 2017» que se prolongarán hasta el mes de agosto, informa Ical.

El objetivo del proyecto será levantar diferentes puntos del yacimiento que fueron representativos en aquella época y se harán visitables para todos aquellos turistas que quieran acercarse a ver cómo era Numancia siglos atrás.

La Consejería de Cultura y Turismo ha financiado esta campaña con una aportación de 18.150 euros, los cuales serán invertidos en la reconstrucción de la manzana XXIV (con una extensión de 1.600 metros cuadrados), como continuación de los trabajos iniciados el año pasado, con los que se llegó a la conclusión de que en Numancia había cuatro niveles de ciudad: indígena, celtíbera y dos romanas.

Este trabajo será realizado por sesenta personas que se repartirán en dos grupos de treinta, acompañados (en agosto) también por 22 jóvenes del campo de trabajo de la modalidad de arqueología «La Numancia celtibérica», que se desarrollará en Garray por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades en colaboración con la Diputación de Soria antes de que acabe este año 2017.