La primavera será moderada para los alérgicos al pólen

Toledo es la seguna provincia con mayor población alérgica al olivo en España

Los profesionales recomiendan usar gafas de sol y mascarilla para paliar los síntomas del pólen ABC
Elisabeth Bustos

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Si la primavera pasada fue más suave para los alérgicos, por el calor que hizo en los meses de abril y mayo, este año no lo será tanto. Las previsiones para este 2018 apuntan a que la intensidad de las alergias será moderada en la provincia de Toledo , con niveles máximos de 4.874 granos por metro cúbico de aire, según avanzó a ABC el responsable de la Unidad de Aerobiología del Servicio de Alergia del Complejo Hospitalario de Toledo y presidente del Comité de Aerobiología de la Sociedad Española de Alergía (SEAIC), el doctor Ángel Moral .

La provincia de Toledo tiene una población alérgica de 200.000 personas, y de ellos, el 75%, -unos 150.000 habitantes- , son alérgicos a pólenes de plantas. Las principales causas de alergia son, en orden de importancia, las gramíneas , seguida del olivo (ambas polinizan entre mayo y junio), el ciprés (polen de invierno, de enero a finales de marzo), la salsola (en los meses de verano) y el plátano de sombra (entre finales de marzo y primeros de abril.

Un número, que según las previsiones de la SEAIC, irá en aumento, ya que se calcula que en 2030 uno de cada cuatro españoles serán alérgicos al polen , como consecuencia de la contaminación y el cambio climático . «Tanto el aumento del CO2 como el de la temperatura global actúan como fertilizantes de las plantas y estimula la fotosíntesis y como consecuencia de este proceso las plantas se desarrollan más y con ello, los pólenes», explica el doctor Moral.

Por otro lado, añade, las plantas no pueden moverse y en los lugares donde existe más contaminación como son las ciudades o cerca de las autopistas modifican su metabolismo para subsistir en un ambiente nocivo generando proteínas de estrés que hacen que los pólenes sean más nocivos. Esto explicaría por qué las alergias son más frecuentes en las grandes ciudades que en el campo, a pesar de que en el campo existe un mayor número de plantas», aclara.

En tercer lugar, continúa, «la contaminación y el cambio climático están produciendo una modificación en la polinización de las plantas, de tal manera que, a temperaturas agradables, las plantes adelantan su proceso de polinización y retrasan más su final, por lo que este proceso cada vez es más largo y los pacientes están más tiempo expuestos a los pólenes. En definitiva, cada vez hay más pólenes y son más agresivos. Antes una planta daba problemas alérgicos uno o dos meses, ahora duran tres o cuatro», explica.

La provincia de Toledo ocupa el tercer lugar a nivel nacional en cuanto a población alérgica a las gramíneas, por detrás de Cáceres y Badajoz, y comparte la segunda posición con Córdoba en cuanto a las alergias al olivo, solo por detrás de Jaén (donde hay una cuarta parte de todos los olivos que hay en España).

El doctor Morales recomienda utilizar gafas de sol, llevar mascarilla, viajar siempre con las ventanillas del coche bajadas del coche e instalar filtros antipolen. Cambiarnos de ropa y lavarnos las manos siempre que entremos a casa, ventilar la vivienda a primera hora de la mañana o última hora de la tarde y utilizar los tratamientos que hayan prescripto los profesionales. «Las vacunas son el único tratamiento que puede hacer que las alergías desaparezcan porque inmunizan al paciente y hace que tomen menos fármacos».

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