La línea Zaragoza-Teruel-Valencia sigue siendo un «tren tortuga». La línea ni siquiera está electrificada
La línea Zaragoza-Teruel-Valencia sigue siendo un «tren tortuga». La línea ni siquiera está electrificada - Fabián Simón
Ferrocarriles

Renfe y Adif solo invirtieron en Aragón el 11% de lo que habían prometido en 2016

La red ferroviaria aragonesa languidece por una histórica falta de inversiones. Teruel es la provincia que sale peor parada

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El nivel de ejecución presupuestaria de Renfe y Adif está por los suelos en Aragón. El último año fue tan bajo que solo se hicieron realidad el 11% de las inversiones que el Estado había prometido para mejorar la red ferroviaria de esta región. Es decir, de cada cien euros que había prometido invertir, solo 11 se hicieron realidad, según la documentación oficial recopilada por ABC.

El Estado había anunciado unas inversiones de 48,29 millones de euros para la red ferroviaria aragonesa durante el año pasado. Así lo consignó en los presupuestos de Renfe y Adif. Sin embargo, solo se ejecutaron 5,27 millones de euros. De los otros 43 millones de euros, ni rastro, ni en obras ni en equipamientos que mejoren la precaria situación que arrastra una buena parte de la red ferroviaria de Aragón.

El caso es especialmente sangrante en la provincia de Teruel, cuya única línea ferroviaria languidece por una histórica falta de inversiones que la han sumido en un trazado poco competitivo, escasamente atractivo para los viajeros y de pobres resultados para las mercancías. Y eso que está en un eje de comunicación estratégico, el que conecta el País Vasco con Valencia a través de Zaragoza.

La situación tampoco es boyante por el norte. La necesaria modernización del tren que llega hasta Canfranc, a las puertas de Francia, sigue en lista de espera. Como lo está también el necesario acuerdo con el país vecino sobre este paso ferroviario, acuerdo imprescindible para rehabilitar el viejo túnel por el que cruzaba este tren internacional a través del Pirineo.

El déficit de inversiones se ha extendido también a otros servicios regionales, líneas convencionales e incluso a la porción de la red del AVE que discurre por suelo aragonés.

Así, ADIF-Alta Velocidad había previsto invertir en Aragón el año pasado un total de 13,46 millones de euros. Sin embargo, al acabar el año apenas había invertido realmente 1,53 millones, tan solo el 11,4% de lo que había prometido.

Más escandalosa es la ejecución presupuesatria de las inversiones anunciadas por Renfe Operadora, que deberían haber ido destinadas a modernizar los equipos dedicados al transporte de mercancías y de viajeros. Había anunciado para 2016 unas inversiones globales de 27,14 millones de euros, pero tan solo hizo efectivos 22.930 euros. Es decir, una tasa de cumplimiento del 0,1%.

En cuanto al resto de inversiones en líneas convencionales de ferrocarril -no de Alta Velocidad- prevista por ADIF, la tasa de cumplimiento ni siquiera llegó al 50%: había prometido invertir en Aragón el año pasado 7,68 millones de euros, pero solo hizo realidad 3,72 millones.

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