Un laboratorio para salvar la valiosa almeja del Ebro: más de 16.000 euros por ejemplar

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) va a construir y poner en marcha un laboratorio dedicado, específicamente, a preservar la almeja del Ebro, la Margaritífera auricularia, una especie en grave peligro de extinción y altamente protegida por la legislación mediambiental. Baste un dato: capturar un ejemplar de esta singular almeja de agua dulce está castigado en Aragón con más de 16.000 euros, cantidad en la que a efectos administrativos y medioambientales se valora esta especie.

El laboratorio que se va a construir se localizará en el Canal Imperial de Aragón. Este gran cauce artificial, que empezó a ser construido a finales del siglo XVIII, es desde hace tiempo la principal reserva que le queda a esta especie, un tipo de almeja de agua dulce que puede llegar a vivir cien años y que alcanza gran envergadura.

La construcción y puesta en marcha de este nuevo centro de investigación dedicado a la Margaritífera auricularia será dirigida por la CHE, aunqu eel proyecto es promovido por el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, en colaboración con el Gobierno aragonés y el Gobierno de Navarra.

Por otra parte, la CHE acaba de concluir tres actuaciones destinadas a la mejora del hábitat para náyades del Ebro en Aragón, en concreto para la Anodonta anatina, Potomida litoralis y Unio mancus.

Esta acción general es el resultado de la coordinación administrativa entre la CHE y el Gobierno de Aragón en el marco de la «Estrategia de conservación de la almeja de río, Margaritifera auricularia, en España».

Los trabajos han consistido en pequeñas intervenciones para facilitar la entrada de agua y mantenimiento de caudales en tres brazos laterales o «madres» que constituyen hábitats actuales o potenciales de náyades y que se veían afectados por la situación de estiaje.

En concreto se ha actuado en la Mejana aguas arriba de Gallur, en el término municipal de Novillas; en la Madre de la Matilla, en Alcalá de Ebro y en el brazo de Juslibol, en Zaragoza, en todos los casos con informes favorables y coordinación con el Gobierno de Aragón.