Los seis principios de Pedro Sánchez para pactar

Pedro Sánchez presentó este mediodía de forma solemne los «seis principios para el Gobierno del cambio», una especie de «límites» para la negociación de pactos el día después al 26-J, según fuentes socialistas.

En una comparecencia sin preguntas en una localización muy simbólica, el monumento a la Constitución de 1978 en Madrid, a la que se había añadido el «sí» gigante en color rojo que luce el PSOE en sus mítines para esta campaña, Sánchez explicó que su partido «sale a ganar las elecciones; y en un mensaje a votantes desencantados de Podemos advirtió de que «el cambio no tiene intermediarios».

España vive una «encrucijada» y hay que hablar claro, dijo, porque estas no son unas elecciones más.

Y antes de «con quién va a pactar», el PSOE quiere detallar «qué» ofrece a los ciudadanos y hasta dónde está dispuesto a llegar.

En primer lugar, dijo, el PSOE mostrará un «rechazo rotundo» a cualquier tipo de recortes en Educación, Sanidad y el resto de servicios que conforma el Estado de Bienestar; con un rechazo a los copagos sanitarios, derogar la LOMCE, un ingreso mínimo vital para 700.000 familias ya sin recursos y rechazo a las amnistías fiscales.

Habrá una derogación «de facto» de la reforma laboral del PP, un plan de choque para los parados de larga duración y jóvenes que no logran acceder a su primer empleo. «Sí al subsidio por desempleo para mayores de 45 años con cargas familiares y a los mayores de 52 hasta la edad de jubilación», dice el documento de los socialistas.

«España federal»

En materia de regeneración, habrá «designación parlamentaria» de los órganos institucionales del Estado (CGPJ), y derogación de la «Ley Mordaza».

Además, el Gobierno del PSOE se propone aumentar el presupuesto a la atención de víctimas de violencia de género, y «acompañamiento judicial» personalizado para cada una.

El capítulo más llamativo en política territorial es el «no» rotundo al referéndum de «independencia» en Cataluña o en cualquier otro territorio de España.

A cambio, los socialistas proponen una reforma amplia de la Constitución, reconociendo «la diversidad de nacionalidades y regiones en un modelo federal» y no «la desigualdad de trato entre españoles por razón de origen».

Esa reforma de la Carta Magna incluirá cambiar el artículo 135, sin eludir «la obligación de pagar la deuda», pero garantizando la viabilidad de la Sanidad, la Educación, pensiones y Dependencia.

Respecto a Europa, Pedro Sánchez quiere «una nueva senda de cumplimiento de los objetivos de déficit» y negociar un tratado de libre comercio con Estados Unidos (TTIP) «justo» y «no a dejarnos gobernar por la globalización».