Equiparación salarial: policías y guardias civiles sí decidirán por voto telemático
El preacuerdo con Interior para cobrar igual que los Mossos se someterá a refrendo este fin de semana
Será telemática, estará asegurada por una empresa especializada en «internet voting», los resultados se certificarán ante notario y podrán participar los afiliados a cualquier sindicato policial o asociación de la Guardia Civil. Esto es, un 80% de los 64.763 miembros de la Policía Nacional y en torno al 60% de los 77.928 agentes de la Benemérita, que son los que actualmente están al corriente de pago de las cuotas correspondientes a alguna de las organizaciones representativas de cada uno de los Cuerpos. Aunque siempre cabe apuntarse a una de ellas en el último momento y ejercer el derecho a opinar, puesto que el espíritu de este proceso no es otro que tomar el pulso a cada una de las plantillas para seguir negociando en la dirección que se decida.
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Son las claves de la consulta que, de manera conjunta, los sindicatos de Policía Nacional y las asociaciones profesionales de la Benemérita llevarán a cabo, previsiblemente a partir de hoy, para recabar o no el respaldo de sus bases al pre acuerdo alcanzado la noche del martes con el Ministerio del Interior , en virtud del cual los agentes integrados en ambas instituciones verán aumentar sus salarios año a año hasta igualar en 2020 a los de los Mossos d´Esquadra , el cuerpo de seguridad mejor pagado de España.
Seguir negociando
Previsiblemente, la votación se desarrollará hasta la noche del domingo o el lunes y con los resultados en la mano, los representantes policiales y de los guardia civiles se reunirán, en principio, la tarde del lunes con quien ha sido su interlocutor, –el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto– «para continuar la negociación».
«Lo que salga de este proceso no es un sí o un no final al pre acuerdo, es para seguir negociando», indica el portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), Juan Fernández que, a preguntas de este diario, reconoce que para su organización «la oferta del Ministerio es buena , aunque todavía puede mejorarse», a pesar de lo cual permanecerán «neutrales» con vistas a la votación y sin tomar posiciones «a favor o en contra». Habrá asambleas en las delegaciones provinciales para informar a la plantilla y resolver dudas y también se remitirán circulares para dar a conocer los pormenores de la propuesta.
No se ha establecido un mínimo de participación para validar la consulta, –se cree que será «masiva»– y, en cuanto a si la propuesta será refrendada, la AUGC «apuesta por que la satisfacción será mayoritaria». También lo espera el Sindicato Unificado de Policía, (SUP), cuyo portavoz, Ramón Cosío, avanza que, si por el contrario el resultado es de rechazo, van a seguir «negociando con la misma intensidad».
Optimismo
En el Ministerio del Interior hay «optimismo». Prevalece, –en palabras de su titular, Juan Ignacio Zoido, pronunciadas ayer en una entrevista en TVE– la sensación de que se está a las puertas de un «acuerdo histórico» . Treinta años de reivindicación de una equiparación salarial que ningún gobierno ha atendido –ni siquiera los anteriores del PP– han coincidido ahora con una explosión de apoyo social y afectivo a los Cuerpos de Seguridad producto de su intervención en la crisis catalana, un clima propicio que ninguna de las partes quiere desaprovechar.
A título de promedio, si fraguan las mejoras salariales que están sobre la mesa, un guardia civil estará recibiendo en 2020 un total de 720 euros más al mes que ahora y un policía nacional, 561 euros. Con o sin Presupuestos, y si es necesario vía decreto, esa subida estaría consolidándose ya desde este mismo enero, pues los importes previstos con el Ministerio tienen carácter retroactivo, lo que significa que más tarde o más temprano, los agentes van a recibir este año una paga con los atrasos. Eso si se cierra el acuerdo.
El compromiso trasciende lo meramente coyuntural, en tanto que el departamento de Interior se ha comprometido además a sacar adelante una ley «anti brecha salarial» que garantizará «para siempre» la «equiparación justa» entre los distintos cuerpos, en la media en que contemplará el principio de que, a iguales circunstancias, trabajo funciones, deberá siempre corresponder el mismo sueldo.
