Estados Unidos acusa a Fiat Chrysler de trucar 104.000 vehículos para ocultar emisiones

El grupo Fiat Chrysler Automobiles (FCA) corre el riesgo potencial de una multa de 4.630 millones de dólares, por «trucar datos de las emisiones diesel» en dos de sus modelos producidos en Estados Unidos. La Agencia para la protección ambiental americana (EPA), la misma que en septiembre 2015 hizo explotar el escándalo «dieselgate» al investigar al grupo alemán Volkswagen, ha acusado a FCA de violar la normativa americana (el Clear Air Act) sobre emisiones diesel.

La acusación precisa que Fiat Chrysler (FCA) habría montado sobre los mores diesel de 104.000 vehículos un sistema informático que ha permitido emisiones superiores a lo consentido por la ley. En una nota de la EPA las autoridades norteamericanas afirman que el grupo FCA habría instalado sin decirlo un sistema electrónico («engine management software», Ems) en los modelos Jeep Grand Cherokees y Dodge Ram 1500, producidos en los años 2014, 2015 y 2016 con motores diesel a tres litros, vendidos en Estados Unidos

. Para las autoridades americanas, FCA «esquivó las reglas y ha sido descubierta».

Violación «seria y clara»

La Agencia para la protección ambiental americana ha definido «clara y seria» la violación de las leyes sobre emisiones por parte de Fiat Chrysler, con el riesgo de una multa potencial de 4.630 millones de dólares. «La sanción sería de 44.539 dólares por vehículo», ha manifestado un representante de la EPA. Justamente el jueves Volkswagen llegó a un acuerdo negociado con el gobierno americano por el escándalo del «», admitiendo su responsabilidad y aceptando pagar una multa de 4.300 millones de dólares.

El grupo Fiat Chrysler, dirigido por el italo-canadiense Sergio Marchione, profundamente disgustado con la acusación, ha replicado sosteniendo que respeta la ley: «La sociedad colaborará con la administración Trump para presentar sus propios argumentos y resolver la cuestión de modo correcto y justo, asegurando a la agencia EPA y a los clientes en Estados Unidos que nuestros vehículos diesel respetan la normativa», afirma el grupo FCA.

Sin duda, para Fiat Chrysler es un fuerte varapalo. Sea cual sea el resultado final tras la acusación, la imagen de FCA se puede resentir, por lo que se refiere a su fabricación de modelos diesel, como le ha ocurrido a Volkswagen.

Han sido muy negativas las repercusiones de la acusación americana para las acciones de FCA en la Bolsa de Milán. Al final el título perdió el 16,14%. Caída también del 9,36% para el socio Exor, la holding financiera de inversión de la familia Agnelli, que transfirió el pasado año desde Turín a Holanda su sede legal y fiscal.