Las autonomías han creado 125.000 empleos públicos desde el final del año 2013

Al calor de la política expansiva que diseñó el Gobierno de Rodríguez Zapatero el empleo público continuó creciendo en España en los años más duros de la crisis mientras la recesión devoraba más de 3,5 millones de puestos de trabajo en el sector privado. Durante 2008, en plena recesión, el número de funcionarios y asimilados laborales rompió la barrera de los tres millones (3,08 millones) y se mantuvo en estos niveles hasta el cuarto trimestre de 2012.

Los duros ajustes a los que se vio obligado el Gobierno por la herencia envenenada de un déficit público que rozó el 9% forzaron la puesta en marcha de un plan de ajuste de 65.000 millones, en el que se primó la rebaja de impuestos y se pusieron en marcha medidas que afectaron a las contrataciones públicas, a la oferta de empleo público.

La tasa de reposición fijada por el Ejecutivo socialista en 2010 se mantuvo en del 10% —solo se sustituyó a uno de cada diez funcionarios jubilados— lo que hizo que la contratación se frenara. De los 3,2 millones de empleos que había en 2010, el pico más alto durante la crisis, se pasó a 2,9 millones en 2013, el más bajo.

Hoy, el número de empleados públicos ha vuelto a situarse por encima de los tres millones. En concreto, 3.000.700 trabajadores están al servicio de alguna de las administraciones del Estado. El número de empleados públicos lleva creciendo de forma casi ininterrumpida desde hace dos años, en los que ha sumado casi 92.000 puestos de trabajo. Según la Encuesta de Población Activa (EPA) la ocupación en el sector público crece a un ritmo anual del 2,5%, cerca del 3% en el que avanza ya el empleo en el sector privado. Este cambio de tendencia se refleja especialmente en las comunidades autónomas, que han creado 124.600 puestos de trabajo desde el cuarto trimestre de 2013, el ultimo año de la crisis. Los gobiernos regionales tienen contratados a casi 1,7 millones de empleados públicos, tres veces más que la Administración central, un reparto que se explica porque las autonomías gestionan la educación y la sanidad, los servicios más intensivos en mano de obra.

Solo cuatro comunidades autónomos han reducido el número de empleados públicos: Cataluña, Murcia, Canarias y Cantabria en los últimos dos años. Y la región que más ha aumentado las plantillas ha sido Andalucía, que ha sumado en dos años 36.900 nuevos ocupados. La comunidad que preside Susana Díaz concentra casi el 20% de los empleados que hay en toda España

España es uno de los países con menos empleados públicos de la OCDE, aunque es uno de los dedica mayor parte de su gasto público a remunerar a estos trabajadores. Tal y como muestra el último informe de la OCDE «Government at a Glance», el empleo público como porcentaje del empleo total en España está por debajo de la media de los países pertenecientes a esta organización. El informe analiza los datos de 2013, fecha en la que España tenía alrededor de un 17% de todos los ocupados trabajando para las administraciones públicas. Según la OCDE, las administraciones públicas españolas acumulan el 13% del empleo de la población laboral total, seis puntos por debajo de la media de la OCDE (19%). Sin embargo, dedican el 24,8% del gasto público a pagar nóminas mientras que la media de estos 34 países se sitúa en el 22,9%.