Los fondos perfilados se están posicionando como la baza más fuerte de las entidades
Los fondos perfilados se están posicionando como la baza más fuerte de las entidades - abc

Fondos perfilados: cómo controlar el riesgo en la búsqueda de rentabilidad

La respuesta de las entidades a la nueva necesidad de los clientes conservadores

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La ausencia de alternativas de inversión para el ahorrador más conservador ha llevado a las gestoras a plantear nuevos productos, capaces de dar respuesta a estas demandas. «El entorno actual de tipos, con el interés del depósito o de la deuda a corto plazo en mínimos, deja a los clientes sin opciones de ‘no riesgo’ para rentabilizar los ahorros, lo que nos obliga a dar un paso más allá», explica María Taboada, directora de producto para Europa de BBVA Asset Management. La respuesta a esa necesidad se ha materializado en los fondos de inversión, principalmente en la categoría de los mixtos, es decir, aquellos que invierten tanto en renta fija como en renta variable, variando el peso según el riesgo del fondo.

Según datos de Ahorro Corporación, hasta finales de abril, la categoría ha vivido un crecimiento bruto de más de 6,700 millones de euros y las entradas de capital en ese periodo ascienden a los 7.000 millones. Un ritmo significativamente superior al del conjunto del sector de fondos de inversión.

Ajustar el riesgo

Dentro de esta categoría de mixtos, los fondos perfilados se están posicionando como la baza más fuerte de las entidades para responder a esa necesidad de ahorro adecuada a cada perfil de riesgo. Este tipo de producto, por lo general, suelen ser carteras compuestas a su vez por otros fondos de inversión. Es decir, cada casa elige entre lo mejor de lo mejor de todo el mercado. El hecho de poder conocer de antemano el riesgo de cada fondo y poder «perfilar» al cliente en función de su tolerancia al mismo, por ejemplo «si confía en la delegación de la gestión o prefiere una inversión más referenciada al índice», explica Taboada, es uno de los motivos de su éxito.

Un ejemplo de cómo las gestoras maximizan el binomio rentabilidad/riesgo mediante la diversificación entre clases de activos lo podemos ver en los fondos BBVA Multiactivo Conservador, Moderado y Decidido, donde la exposición a la renta fija, a Bolsa y a divisas se acota según el perfil de riesgo de cada inversor.

Y es que los perfilados buscan dar un paso más allá que los fondos mixtos. Como explica Santiago Montero, gestor de Multigestión de March AM, permiten realizar una estrategia más dinámica y flexible en la inversión; una capacidad clave para ajustarse al volátil entorno del mercado actual. Aunque en todo el espectro de su gama de fondos perfilados coincide el objetivo de preservación de capital, varía la exposición a renta variable -que logran con productos de la casa como el Torrenova o el The Family Businesses-y a renta fija, donde confían también en fondos de terceros, como el Jupiter Dynamic Bond. La búsqueda de un gestor que sepa adecuarse a cada giro del mercado es crucial, afirman los expertos. Por lo que también predominan en las carteras fondos multiactivos, como el Nordea Stable Return o el Henderson Pan European Alpha.

Pero pese a la fuerte caída de las rentabilidades en los fondos puros de renta fija, no todos los ahorradores pueden -ni deben- aceptar mucho más riesgo en sus carteras. Desde Merchbanc, que llevan comercializando con productos adaptados a necesidades concretas a través del Merch Fontemar, el Merch Universal y el Merch Eurounión desde 1987, María Martínez explica que para ese tipo de clientes, diversifican con una exposición a renta variable, sí, pero con un límite del 25%.

«Hasta hace tres meses los fondos de renta fija daban rentabilidades positivas, pero llega un momento en el que el segmento no da para más», lamenta Valero Penón, director de Ibercaja Gestión. Aún así, aunque de los activos puros de renta fija hay que ir saliendo, Penón reconoce que hay mucha labor por hacer. Lo que recomienda a sus clientes es no mirar la cuenta «cada 15 días» ya que sustos puntuales del mercado puede llevarnos a perder costes de oportunidad.

Una tendencia de futuro

Aunque esta tendencia ha comenzado a remontar en los últimos dos años, los expertos coinciden en que solo irá en aumento. «Hemos pasado de ahorrar a corto plazo a invertir en el largo», afirma Encarna Ramos, responsable de ventas de la red de Deutsche Bank (DB) en Deutsche AWM. Era una transición que había comenzado a principios de los años 2000, pero como recuerda: «La crisis financiera trasladó un flujo importante del capital hacia los depósitos». Aún así, sostiene que la tendencia ha vuelto a arrancar ya que «a través de los fondos, además de las ventajas fiscales que ofrecen, tenemos un acceso a todos los mercados globales, a través de una gestión profesional y con la capacidad de diversificar», sentencia.

Ver los comentarios