El coste por trabajador sube un 0,5% y rompe con los descensos de los cuatro últimos trimestres

El coste laboral de las empresas por trabajador y mes alcanzó los 2.487,4 euros en el primer trimestre del año, lo que supone un aumento del 0,5% respecto al mismo periodo de 2014, que rompe con los descensos registrados en los cuatro últimos trimestres. Según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL) difundida este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE), de dicho gasto, el coste salarial (que incluye salario base, complementos, pagos por horas extraordinarias y atrasos, todo medido en términos brutos) se situó en 1.831,7 euros por trabajador y mes, un 1,4% superior al año anterior. El coste salarial es el componente que más influye en el coste total en que incurre un empleador por trabajador y mes.

El INE destaca que, si se excluyen del coste salarial los factores más variables (como las pagas extra y los atrasos, que disminuyen en este periodo), el salario ordinario habría aumentado el 0,3%.

En cuanto a los otros costes no salariales, el descenso fue del 1,9% (655,74 euros), debido a que las percepciones no salariales se recortaron el 17% (78,52 euros), en tanto que las subvenciones y las bonificaciones de las cotizaciones a la Seguridad Social aumentaron el 44,1%.

El coste laboral por hora creció el 1,2%, un incremento superior al del coste por trabajador, que se debió a una caída del número de horas efectivas de trabajo, por lo que, eliminado este efecto y el de calendario, el crecimiento calculado del coste por hora fue del 0,7%.

Por sectores, los servicios, con 2.400,6 euros fue el único sector que registró un incremento de los costes laborales (del 0,9%), debido al mayor incremento del coste salarial y a la menor disminución de los otros costes, ya que presenta los mayores incrementos en las pagas extra y los atrasos. En cuanto a la industria (2.927,4 euros) y la construcción (2.543,9 euros) contabilizaron una caída del 0,3% y 1,1%, respectivamente. En el caso de la industria, destaca el aumento de los salarios ordinarios y de las pagas extra, así como la reducción de otros costes, en especial, despidos e indemnizaciones por fin de contrato.

Por actividades, los mayores incrementos del coste laboral se dieron en la Educación (5,9%), la Administración Pública y Defensa; Seguridad Social Obligatoria (2,1%) y el comercio (1,8%). Por el contrario, los mayores descensos se contabilizaron en las actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento (9%), el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (8,1%) y los otros servicios (3,5%).

Por comunidades autónomas, el coste laboral en Madrid y País Vasco superó en más de 300 euros a la media nacional, y en Extremadura, Canarias y Castilla-La Mancha dicho coste fue inferior a la media en la misma cantidad.

Atendiendo al crecimiento interanual del coste, La Rioja, Aragón y Canarias presentaron las tasas de crecimiento más elevadas, mientras que Castilla-La Mancha, Asturias y Comunidad Valenciana contabilizaron los mayores descensos.

Durante el primer trimestre del año, la jornada semanal media pactada fue de 34,3 horas (considerando conjuntamente el tiempo completo y el parcial), de las que se perdieron unas 3,6 horas de media semanales, la mayoría por vacaciones y días de fiesta. Si se añaden las horas extra y se restan las perdidas, la jornada semanal se reduce a 29,8 horas efectivas de trabajo.

La diferencia salarial entre los trabajadores a tiempo completo y parcial fue de 4,62 euros por hora (14,29 euros/hora para el completo y 9,67 euros/hora para el parcial).