formación & empleo

Píldoras de formación digital para todos los bolsillos

"Digital Learning Pills" ofrece sencillos cursos de inteligencia emocional a través del móvil, al alcance de cualquier empleado

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La idea comenzó a gestarse hace tiempo pero ha sido la trepidante evolución de las nuevas tecnologías el trampolín que ha hecho posible que Digital Learning Pills ( DLP) esté ya funcionando. El fundador de esta pequeña gran empresa de formación online, Michael de José, ha combinado en este proyecto, que parte de un móvil y de una «tarifa plana» —50 euros más IVA el curso—, su triple experiencia: en el campo empresarial, como directivo en compañías nacionales y multinacionales; en el formativo, como profesor en escuelas de negocio como ESCP Europe, ESIC Business & Marketing School o Shanghai Business School; y en el académico, como doctor en Inteligencia Emocional.

Su papel al frente de DLP ha sido el de supervisar al equipo de formadores y « coachers » que ha elaborado el contenido de los cursos, asegurando el rigor científico y su aplicación en cualquier ámbito de la realidad empresarial.

El pilar de esta iniciativa es acercar la formación en habilidades y herramientas profesionales a cualquier profesional, independientemente de su categoría, ya que lo normal es que este tipo de programas solo estén al alcance de directivos y altos ejecutivos. Algo que durante años preocupó a De José, «que siempre tuvo claro la utilidad de implementar estos programas a cualquier nivel y de su impacto personal y profesional en todos los empleados», explica Ángel de José, director general de Digital Learning Pills e hijo del fundador.

El acceso a cada uno de estos cursos puede hacerse a través de cualquier plataforma —vía app, android o IOS, o bien PC— y aprovechando el espacio de tiempo que a cada usuario le parezca más oportuno. Esta es sin duda una de las principales ventajas que ofrece la formación online, especialmente en el caso de profesionales en activo, que pueden conectarse «en cualquier momento y en cualquier lugar», tal y como subrayan desde la empresa.

Cada vídeo a su tiempo

El alta permanecerá durante 45 días desde el inicio del curso, pero cada píldora solo se desbloqueará cuando el alumno haya visualizado la inmediatamente anterior y con un día de diferencia. Es decir, hay que seguir el programa paso a paso, sin saltarse ninguna lección ni alternarlas de forma aleatoria. «Lo que sí está permitido es volver sobre lo que ya se ha estudiado, para fijar mejor la información o repasar el contenido cuantas veces sea necesario», aclara De José.

Cada programa se ofrece en español y en inglés, con actores-tutores que han cuidado especialmente tanto los acentos como la actitud formativa para favorecer el aprendizaje.

Tras cada uno de los vídeos o tutoriales de unos tres minutos de duración que contiene cada «píldora» se sugiere una «lista de tareas», que «entendemos que es tan importante como el contenido audiovisual», asegura De José. «La idea — continúa— es que se realicen estas tareas o al menos alguna de ellas en el mismo día de la visualización. Aunque lo que sería realmente efectivo es que cada alumno adapte esas tareas a las características de su trabajo para que el impacto sea mayor».

«El objetivo final es ayudar al alumno a desarrollar hábitos emocionalmente sanos y actitudes positivas que mejoren su valor como persona y profesional y estén alineados con la cultura y estrategia de la empresa», concluye.

Ver los comentarios