«En la selección todas trabajamos por un mismo fin, sin arrogancia»

Bastión de las 'RedSticks', Rocío Gutiérrez Sierra (San Fernando, 20 de julio de 1985) vivirá en agosto el sueño que todo deportista anhela y que pocos logran: acudir a unos Juegos Olímpicos.

Infranqueable en la retaguardia, esta isleña asentada en el Club de Campo Villa de Madrid da el paso al frente huyendo de los focos, con naturalidad, humildad, sensatez, persistencia y tenacidad. Es su momento.

–En agosto cumplirá el mayor sueño de todo deportista. Llegan los Juegos Olímpicos, toca visitar Río de Janeiro.

–Es un evento totalmente diferente, se trata de un sueño cumplido. Deportivamente puede ser como un Mundial porque te encuentras con los mejores equipos, pero todo lo que envuelve esta cita se escapa a todo lo demás.

–¿Qué se siente al conocer que entra en la lista del seleccionador?

–Me vino a la mente todo el esfuerzo realizado durante tantos años. La cosa pintaba bien porque en una preparación tan larga vas viendo la confianza que tiene en ti el míster, pero hasta que no dan la lista definitiva no dices... ¡ahora sí que es verdad!

–¿Cómo se viven estas semanas previas?

–Es una mezcla de ver qué nos espera en Río y de continuar con la preparación para llegar de la mejor manera posible.

–¿Cómo afronta un reto de tal dificultad? ¿Teme a algún adversario?

–Holanda, que es nuestro rival en el primer partido, es número uno y siempre está muy arriba en el ránking mundial. Todas tienen mejor ránking que nosotras en los Juegos, así que no podemos ir de favoritas. Hay que disfrutar, que vaya lo mejor posible, sacar adelante el partido de cuartos y luego que venga lo que venga.

–Pocos deportistas gaditanos estarán en Río. Todo un orgullo.

–Es un orgullo representar a España, Andalucía, la provincia de Cádiz y San Fernando. Ser la única cañaílla y de los pocos gaditanos en estar en Río de Janeiro es un honor. Hay que disfrutar el momento.

–¡Y vaya orgullo para una familia tan vinculada al hockey!

–Mi padre, mis hermanos, mi tío, mis primos están vinculados a este deporte y me aconsejan que lo disfrute. Igual les doy algún consejo a ellos en el campo, aunque todos tenemos que aprender de todos. No olvido mis raíces en el CH San Fernando y me siento orgullosa de mis orígenes.

–De ahí también salió su paisana Yurena Panadero. Le toca recoger su testigo en unos JJOO. Ella estuvo en Pekín (2008).

–Es una responsabilidad. La veía y me daba envidia sana, pero se lo merecía. Ahora, después de mucho trabajo, me toca a mí.

–Granítica en la zaga, con un liderazgo silencioso... Tiene buen cartel.

–Me enorgullecen esos comentarios. Si tus compañeras piensan así de ti es que el trabajo está bien hecho. Te sientes muy orgullosa del papel que te dan en el equipo y sientes tranquilidad por estar ahí.

–¿Cuál es la gran virtud de este grupo?

–Que todas somos diferentes y cada una venimos de un sitio. Sin embargo, nos llevamos muy bien entre todas y no tenemos problemas. No hay egos personales. Todas trabajamos por un mismo fin.

–¿Con qué compañera tiene más 'feeling'?

–Con Alicia Magaz, mi compañera en el Club de Campo Villa de Madrid y compañera de habitación. También con María Tost (se quedó fuera de la lista) y Marta Segú (no entró en el grupo de trabajo).

- ¿Cómo define al seleccionador?

–Adrian Lock es clave en la unión del grupo. A priori puede ser frío, pero nada más lejos de la realidad. Es un entrenador del que se pueden sacar muchas cosas. En los años como seleccionador ha logrado que cambiemos la mentalidad de trabajo y por eso nos va tan bien.

–¿Se ve vinculada al hockey en el futuro?

–Me gustaría seguir en el hockey pero compaginándolo con otro trabajo porque del hockey no se puede vivir.

–¿Qué ha aprendido en estos años?

–Que hay que trabajar mucho y hacer oídos sordos tanto a los buenos comentarios como a los malos. Que nada te desvíe de tu objetivo, meta o sueño. Si te dicen que eres buenísimo, no tienes que conformarte. Si te dicen que no vales, no arrojes la toalla. Siempre hay que luchar.