Álvaro de Diego González: «Los enemigos de la Transición nunca habían sido tantos en el Congreso»
El escritor reivindica la parte la parte más polémica de este proceso, «la transición que finalmente no triunfó, la de los primeros meses del gobierno de la monarquía encabezado por Arias Navarro». Ahora, desarrolla esta tesis como protagonista de la próxima conferencia del Aula Cultura ABC, que se celebra hoy a las 19:30 en la Sala Bertelsmann
Álvaro de Diego González cree que la Transición nos ha traído mejor sistema democrático de nuestra historia, así como como la única Constitución de consenso que hemos tenido -«las anteriores eran de parte, de partido»-. Sin embargo, este profesor de Historia Contemporánea de la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA) reivindica la parte la parte más polémica de este proceso, «la Transición que finalmente no triunfó, la de los primeros meses del gobierno de la monarquía encabezado por Arias Navarro ». Ahora, el autor desarrollará esta tesis como protagonista de la próxima conferencia del Aula Cultura ABC, que se celebrará hoy a las 19:30 en la Sala Bertelsmann de la calle O’Donnell 10 de Madrid, en un acto presentado por Fernando García de Cortázar , historiador y director de la Fundación Vocento.
González sostiene que los problemas heredados de aquellos tiempos -el territorial, fundamentalmente- tienen más que ver con la fase de ruptura, «cuando Suárez empieza a volar solo y se empieza a improvisar bastante». «Improvisando menos, poniendo coto, se podría haber hecho mejor», explica el autor de « La Transición sin secretos ». «El café para todos fue un error».
A pesar de estas reservas, González defiende que la forma en que llegamos a nuestra democracia fue paradigmática. «Empleamos la vía reformista y tuvimos, relativamente, pocos problemas. Nuestro modelo se ha exportado a muchas partes del mundo, independientemente de que en esos lugares haya tenido mayor o menor éxito», apunta. Lo que sí lamenta es la falta de preocupación por incluir en la educación este período trascendental de la historia reciente: «La Transición es poco conocida por el conjunto de los ciudadanos».
En cuanto a la percepción que tiene la sociedad de este proceso, González afirma que «en los últimos años el relato negativo ha ganado adeptos». En este sentido, señala que hay «una corriente muy crítica en la universidad que la entiende como una suerte perdón de los crímenes franquistas, como la imposición de un olvido». En su opinión, también se alimenta desde la política. «Soy de la idea de que esto empezó a quebrar con las leyes de memoria histórica de Zapatero. Además, está la irrupción de Podemos, que supone una enmienda a la totalidad de la Transición. Los enemigos de la transición nunca habían sido tantos en el Congreso ».
