Sentido común

Después del debate innecesario, sobre la repatriación y el pago de los costos de los misioneros españoles infectados de ébola, la asunción por parte del Gobierno de los gastos de repatriación es, como dijo Rajoy, «de puro sentido común», aunque algunos de su partido no lo tenían tan claro. Hasta ahora, Rajoy, como buen gallego, había permanecido callado mientras muchos trataban de sacar tajada política de una desgracia semejante. Pero no porque Rajoy se lo estuviera pensando, sino todo lo contrario. No tenía ninguna duda. Y, de paso, ha dejado hablar a muchos irresponsables que, desde luego, se han retratado.