confrontación

La división entre los sindicatos y los exDelphi marca la manifestación del 28-F

Los altercados se sucedieron cuando los afectados por el cierre de la factoría de Puerto Real trataron de encabezar la marcha

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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La división, los reproches y los encontronazos entre sindicalistas y extrabajadores de Delphi marcaron la manifestación celebrada ayer en Cádiz con motivo del Día de Andalucía. Lo que parecía una marcha pacífica degeneró finalmente en abucheos y enfrentamientos. Los antidisturbios de la Policía Nacional tuvieron que hacer acto de presencia para calmar los ánimos y evitar que los altercados fueran a mayores. Todo empezó cuando una nutrida representación de la antigua plantilla de Delphi trató de encabezar la manifestación reclamando trabajo para la Bahía. La acción fue rechazada de plano tanto por los sindicatos como por los representantes de otras organizaciones sociales, incluida IU, que participaban en la marcha. Fue entonces cuando se produjeron los primeros forcejeos entre uno y otro bando para evitar que los exDelphi protagonizaran la manifestación del 28-F en Cádiz. El secretario provincial de UGT, Salvador Mera, aclaró que bajo la pancarta única del «empleo» cabía todo el mundo y, por tanto, no se podían diferenciar los exDelphi.

Los sindicatos UGT y CC OO aprovecharon la conmemoración de los 33 años de la autonomía andaluza para convocar una manifestación en la provincia bajo el lema «Por Andalucía. Derechos, empleo y dignidad». A la movilización también se sumó Izquierda Unida y otros colectivos sociales, entre los que destacó una representación de miembros de la plataforma por una Sanidad Pública. La cita era a mediodía en la plaza de San Antonio. A esa misma hora se desarrollaba en el Ayuntamiento de la ciudad un acto institucional con el izado de la bandera y la representación de las autoridades locales.

Los responsables de seguridad de la manifestación se encargaron de distribuir por tramos las pancartas y las banderas. La marcha la encabezó el secretario provincial de UGT, Salvador Mera, junto a a la secretaria de CC OO, Lola Rodríguez. Detrás iba una amplia representación de IU, con la asistencia del viceconsejero de Turismo, Antonio Roldán. El primer enfrentamiento se produjo justo debajo de la sede del PSOE, en la esquina de la calle Ancha, cuando la manifestación inició su marcha. En ese instante, más de un centenar de extrabajadores de Delphi trató de reventar el acto encabezando la protesta y profiriendo gritos contra el gobierno de coalición que forma PSOE y IU en la Junta. Los afectados por el cierre de la planta de Puerto Real se hicieron fuertes en la cabecera de la manifestación, lo que obligó a una dotación de antidisturbios de la Policía a poner orden y separar a uno y otro bando.

La tensión era palpable y en cualquier momento se podía llegar a las manos. Los responsables de la organización de la marcha, entre los que se encontraba el destacado miembro de la Federación del Metal de CC OO, Jesús Serrano, trató sin éxito de convencer a los exDelphi de que sus reivindicaciones no podían monopolizar una manifestación que tenía como lema el «empleo». Los sindicalistas entendían la situación de los exDelphi pero no compartían su actitud en un acto con motivo del Día de Andalucía.

La marcha transcurrió en dirección a la plaza del Palillero, custodiada por la Policía y con la vista puesta en la acción de los exDelphi, que no cesaron de recriminar a los sindicatos su actitud «traidora» ante la situación de paro que vive la Bahía. Las consignas más coreadas por este grupo de manifestantes fueron: «Menos banderas y más trabajo para Cádiz» o «¿Dónde está el dinero del Plan Bahía?». La manifestación siguió su curso por el casco antiguo de la capital hasta desembocar en la Cuesta de las Calesas para dirigirse hasta la sede de la Subdelegación de Gobierno, en Puertas de Tierra, donde se leyó un manifiesto.