El Gobierno y las FARC reanudan el diálogo mientras prosiguen los combates

El Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) reiniciaron ayer los diálogos de paz en La Habana en un ambiente de «confrontación» por la captura de dos policías durante un enfrentamiento con la guerrilla. Para el Ejecutivo es un secuestro mientras que los rebeldes armados defienden su «derecho» a tener «prisioneros de guerra» e insisten de nuevo en la necesidad de un alto el fuego bilateral para avanzar, y suscribir «un tratado de regularización de la guerra».

Sin embargo, Luciano Marín Arango, alias 'Iván Márquez', jefe de la delegación de las FARC, afirmó no tener informe oficial alguno sobre el suceso, y sobre si sus autores son miembros de la guerrilla. Según dijo, esperarán a ver «cuál es el planteamiento de la fuerza o el bloque que ejecutó tal acción».

Antes de abrir la nueva tanda de conversaciones el número dos de las FARC leyó un comunicado que reiteraba su compromiso de «no realizar retenciones con carácter económico». No obstante, Marín Arango precisó que en Colombia existe una «confrontación de dos fuerzas beligerantes y si en ese marco alguien cae capturado en combate no se le puede llamar secuestrado, sino prisionero de guerra».