ESPAÑA

La Conferencia de Presidentes examina el desafío de Artur Mas

Los gobernantes socialistas pretenden abrir un debate sobre el modelo de Estado para avanzar hacia el federalismo

MADRID. Actualizado: Guardar
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La V Conferencia de Presidentes se reúne mañana en el Senado y, aunque no figure en la agenda, el examen crítico a la ofensiva soberanista de Artur Mas estará en el debate del presidente del Gobierno y los 17 gobernantes autonómicos. Tampoco está en el orden del día, pero los gobernantes socialistas pondrán sobre la mesa el modelo de Estado para avanzar de la fórmula autonómica hacia el federalismo, una transición de la que el Gobierno de Rajoy no quiere ni oír hablar.

El presidente de la Generalitat de Cataluña ha prometido no dar plantón a la cita en la Cámara alta, donde no encontrará aliados para sus planteamientos soberanistas. Mas acude con la intención de hacer pedagogía entre sus homólogos sobre el proceso de «transición nacional» abierto en Cataluña tras el rechazo de Mariano Rajoy al pacto fiscal. Pero como es consciente de que sus palabras van a caer en terreno baldío, centrará sus esfuerzos en tejer complicidades para relajar la firmeza gubernamental con los objetivos de déficit de las comunidades, fijado en el 1,5% del PIB para este año, y que Cataluña, como otras autonomías, va a tener dificultades para cumplir.

El Gobierno, en todo caso, no quiere que la reunión sea una oportunidad para leer la cartilla o hacer un ajuste de cuentas al presidente catalán, pero algunos barones, sobre todo del PP, ya han anunciado que no van a dejar pasar por alto el momento para mostrar su desacuerdo con las pretensiones soberanistas. El extremeño José Antonio Monago podrá exponer su propuesta del frente común de PP y PSOE contra las aspiraciones del nacionalismo catalán, pero los socialistas ya han anunciado que no cuente con ellos para operaciones de ese tipo pese a su desacuerdo con el órdago de Mas.

También la castellano-manchega y secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, se ha mostrado muy beligerante con la deriva segregacionista abierta en Cataluña, al igual que el riojano Pedro Sanz y el castellano-leonés Juan Vicente Herrera. Ellos y otros gobernantes populares defienden la vigencia del Estado de las Autonomías, aunque existen diferencias en sus posturas, sobre todo en lo que respecta a la financiación autonómica. Los presidentes de la Comunidad Valenciana, Alberto Fabra, y Baleares, José Ramón Bauzá, plantean que se revise ya el modelo, algo que, por ahora, no entra en los planes de Rajoy.

El presidente del Gobierno avisó la semana pasada de que entrar en esa dinámica sería absurdo, pues sería discutir sobre el reparto de la nada dada la grave crisis. El Ejecutivo, a lo sumo, acepta hacer una evaluación del sistema, y no en la Conferencia de Presidentes sino en el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

Contactos

La Moncloa lo que menos desea es que el encuentro del Senado se convierta en un memorial de agravios y aspira a que se centre en las políticas para hacer frente a la crisis. La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y el vicesecretario de Política Autonómica del PP, Javier Arenas, mantienen contactos con los 11 gobiernos autonómicos que controla su partido para que el debate quede acotado entre esos parámetros. Por si acaso, hoy se reunirán con los presidentes autonómicos de su partido para fijar la estrategia de la cumbre.

Los socialistas José Antonio Griñán, Patxi López y Javier Fernández también tiene hoy cita para cenar con Alfredo Pérez Rubalcaba. Los presidentes de Andalucía, País Vasco y Asturias se han mostrado asimismo críticos con los planes soberanistas de la Generalitat de Cataluña, sobre todo el lehendakari, que está en puertas de unas elecciones autonómicas en las que su gran rival, el PNV, comulga con las postulados de Mas, aunque difiera de la estrategia.

Los tres barones del PSOE abogan por un debate a fondo sobre el Estado de las Autonomías ,que, a su juicio, debe tener una evolución hacia un sistema federal en el que se encontraría el encaje de Cataluña en España, y también del País Vasco si se suma a la deriva soberanista después de los comicios del 21 de octubre.

Los socialistas están decididos a dar ese paso, después de décadas de haberlo rehuido pese a la insistencia del PSC en abrir ese debate. El federalismo que defiende el PSOE, en todo caso, entre iguales, sin la asimetría para las nacionalidades que plantean los socialistas catalanes.